China: Un disidente ciego escapa de arresto domiciliario

El conocido disidente chino Chen Guangcheng huyó de su arresto domiciliario y se encuentra en "un lugar seguro", informaron hoy sus familiares y organizaciones de derechos humanos.

El grupo ChinaAid, con sede en Estados Unidos, dijo que el activista ciego de 40 años está escondido "en un sitio absolutamente seguro en Pekín" tras escapar de un encierro de 20 meses y burlar la vigilancia de una decena de hombres.

Ante las especulaciones de que Chen se halla refugiado en la embajada estadounidense, la portavoz de la legación se limitó a responder a ka agencia de noticias dpa que no tienen "por el momento ninguna información" sobre el tema.

En un video que hizo público tras su huida, Chen expresa su preocupación por su mujer, su hija y su madre. Las autoridades "podrían vengarse con mi familia después de que yo escapara", dice en el mensaje, que publicaron ChinaAid y la web estadounidense boxun.com.

El disidente denuncia graves maltratos sufridos durante su arresto domiciliario, del que también fueron víctimas su mujer y su hija. Lo ocurrido fue "brutal e inhumano", dijo, y pidió al primer ministro, Wen Jiabao, investigar quién ordenó su detención domiciliaria y el maltrato, que incluyó golpizas durante horas contra su mujer y él. "Esos delitos tienen que ser duramente castigados".

Chen se encontraba en el pueblo de Dongshigu, en la provincia de Shandong . Se hizo conocido a fines de los años 90 por su compromiso con víctimas de abuso de poder.

Pese a ser ciego logró graduarse como abogado y fue bautizado como el "abogado descalzo", en alusión a los "médicos descalzos" que recorrían los pueblos de la China revolucionaria tratando a la gente con conocimientos médicos sencillos.

Chen se hizo famoso por denunciar los abusos contra los derechos humanos como consecuencia de la política china del "hijo único" y acusó a los funcionarios de la provincia de Shandong de haber forzado a más de 7,000 mujeres a abortar o a someterse a operaciones de esterilización.

La huida de Chen y su mensaje es embarazoso para el gobierno de Wen, que se encuentra de gira en Europa y se dispone a recibir la proxima semana a la secretaria de Estado norteamericana Hillary Clinton, quien ha evocado a menudo el caso de Chen.