Advierten que pandemia causó el mayor retroceso en la vacunación de los últimos 30 años

Según cifras oficiales, el porcentaje de niños y niñas que recibieron tres dosis de la vacuna contra la difteria, el tétanos y la tosferina (DTP3) disminuyó un 5% entre 2019 y 2021, hasta situarse en 81%. Esto pone de manifiesto el creciente número de niños y niñas que corren el riesgo de contraer enfermedades graves que se pueden evitar.

De acuerdo con ambas instituciones, la disminución se debió a numerosos factores, como el aumento del número de niños y niñas que viven en situaciones de conflicto y entornos frágiles, en los que el acceso a la inmunización suele ser limitado.

También influyó la mayor propagación de información falsa y los problemas relacionados con el coronavirus, como las interrupciones en los servicios y las cadenas de suministro, el desvío de recursos para las labores de respuesta y las medidas de contención que restringieron el acceso y la disponibilidad de los servicios de vacunación.

Catherine Russell, directora ejecutiva de UNICEF, manifestó que “la salud de la infancia corre un grave peligro. Estamos asistiendo al mayor descenso sostenido de la vacunación de la infancia en una generación. Las consecuencias se medirán en vidas”. Agregó que “aunque el año pasado esperábamos sufrir una resaca de la pandemia como resultado de las interrupciones y los aislamientos provocados por la COVID-19, lo que estamos presenciando ahora es un descenso continuado. La COVID-19 no es una excusa. Necesitamos que millones de niños y niñas reciban las vacunas que les faltan; de lo contrario, seremos testigos inevitables de más brotes, más niños y niñas enfermos y más presión sobre unos sistemas de salud que ya están saturados”.

Las cifras del Ministerio de Salud revelan que en el 2019, el 88.1% de niños y niñas se vacunaron con la pentavalente. Un año después, en el 2020, la cifra cayó a 72.2% y si bien en el 2021 se fue recuperando la cobertura (81.5%), aún no se ha llegado a la situación pre-pandemia.

Lo mismo ocurrió con la antipolio. En el 2019 la cifra de vacunados estaba en 87.3% y un año después bajó considerablemente hasta llegar al 71.6%. Para el 2021 se registró un alza (78.8%) pero la diferencia sigue siendo considerable.

En el caso de la primera dosis de la vacuna contra el sarampión, paperas y rubéola que se coloca al año de edad, en el 2019 se llegó al 84.7% y para el 2020 en plena pandemia, la cifra bajó a 77.1. Ya para el 2021 se veía un incremento (78.4%) pero nada comparado a lo conseguido antes del Covid-19. Sin embargo, la caída más dura en torno a esta vacuna para proteger a las niñas y niños de estas enfermedades se presentó en la segunda dosis de refuerzo. Antes de la pandemia las cifras mostraban que solo 65.9% de niños y niñas habían logrado una protección completa. La cifra bajó considerablemente a 52.2% en el 2020 y si bien para el 2021 subió a 59.8%, la cantidad de niños protegidos completamente de estas enfermedades sigue siendo muy baja.

Es importante resaltar que la vacuna contra el virus de papiloma humano que se les pone a las niñas entre 9 y 13 años. Para el 2019 la cobertura llegó a 79.7%. Cayó fuertemente en el 2020 a 19.8% y para el 2021 se ha levantado a 58%. Cifra muy baja que muestra que miles de niñas aún no están protegidas contra este virus.