El perfil del elector. (Juan Mendoza)
El perfil del elector. (Juan Mendoza)

Redacción PERÚ21

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A menos de tres meses para las elecciones presidenciales del 10 de abril, Maritza Rodríguez, un ama de casa de 43 años del distrito de La Victoria, aún no sabe por quién votar. "La verdad que con los chicos en casa y las vacaciones no he tenido tiempo para escuchar noticias y no sé bien quiénes son los candidatos, pero todavía falta, así que supongo que en las próximas semanas definiré mi voto", nos dice.

Gregorio Quispe tiene 53 años y vive en una comunidad de Abancay. Aunque está un poco alejado de la ciudad, Don Gregorio se mantiene al tanto de lo que pasa en la política a través de Internet. "He visto que ya se inscribieron las planchas, sé que hay 19, pero no veo muchas opciones. Habrá que esperar para ver qué ofrecen los candidatos, señorita, pues hasta ahora no sé a quién le daré mi voto", indica.

Así como Maritza y don Gregorio casi el 50% de los electores peruanos aún no han definido su voto. Milagros Suito, directora de Educación y Formación Cívica del Jurado Nacional de Elecciones (JNE) informó que un estudio de ese organismo reveló que el 40% de los ciudadanos decide su voto una semana antes de los comicios, mientras que el 21% lo hace el mismo día.

Suito señaló que esta situación es un reflejo del poco interés de la población en la política, por la desconfianza que tienen los peruanos en las instituciones públicas, así como en los partidos políticos. "Aunque en época electoral el interés en los mensajes de la campaña aumenta, no lo hace lo suficiente para que los electores acudan a las urnas debidamente informados", dijo.

El analista político Luis Benavente refirió que uno de los factores que contribuyen a ese desinterés de la población por la política es la falta de un sistema estructurado de partidos que sea atractivo para el ciudadano. "El peruano no quiere saber nada de los partidos y en el Perú no hay una actividad partidaria permanente. Lo que quiere el peruano es que un partido gane las elecciones para que al día siguiente le dé trabajo, pero eso no es un sistema de partidos sino una agencia de empleos", acotó.

Benavente sostuvo que, aunque hay diferencias entre la población urbana y rural tanto en el tema económico como en el acceso a la educación, lo común en el electorado peruano es que tiene una cultura política muy baja y por lo tanto mucho desinterés por los procesos electorales. "Precisamente por eso el voto se decide a última hora", dijo.

Agregó, en ese sentido, que la población está demandando un cambio y "por eso los candidatos que han comenzado a crecer en las encuestas son aquellos que representan opciones de cambio, como César Acuña o Julio Guzmán, que, aunque son muy diferentes, se presentan como una alternativa distinta a lo existente".

¿QUÉ SE BUSCA?Suito precisó que, según el estudio del JNE, para los electores un candidato ideal es aquel que reúna los requisitos de ser honesto, capaz y que cumpla con las promesas electorales. Además, prefieren que sus autoridades sean profesionales, tengan capacidad ejecutiva y diseñen estrategias que puedan resolver los problemas concretos que los afectan, como la corrupción, la delincuencia y el desempleo.

Según las encuestas de Datum, casi el 50% de los electores señalan también que las propuestas y los planes de gobierno son importantes para definir su voto. No obstante, la gerenta general de Datum, Urpi Torrado, indicó que lo cierto es que la mayoría de electores no lee los planes de gobierno, sino solo un resumen de las propuestas y basa su voto más en una conexión emocional.

El analista político Santiago Pedraglio sostuvo que los programas de gobierno sirven más para que los candidatos logren una visibilidad. "Los programas de gobierno como texto tienen poco o nulo impacto, la gente no los lee, ni siquiera los que critican los planes lo hacen. Sin embargo, estos sí sirven para ubicar a los candidatos respecto de sus contendores, porque les dan un sello propio, como Ollanta Humala en el 2011 con la Gran Transformación o Alan García en el 2006 con el Cambio Responsable. La gente se guía por las propuestas centrales, pero más por las declaraciones, los gestos o compromisos que a partir del plan de gobierno hace cada candidato", dijo.

VOTO CON EL CORAZÓNPara el politólogo Fernando Tuesta Soldevilla eso no basta. El elector no solo se guía por los mensajes sino también por eventos irracionales. "En una campaña electoral la gente no racionaliza, o sea no escucha los discursos ni lee los programas o currículums. La gente sigue a determinado candidato porque le da confianza, porque piensa que es capaz o porque ve alrededor de él simpatía", apuntó.

Tuesta anotó que la gente también vota para evitar que gane un candidato sobre otro. "En el Perú los humores son muy cambiantes. En general la gente vota por el corazón, el estómago y el bolsillo; menos por la cabeza, pero eso no quiere decir que el elector es tonto, sino que busca su bienestar y conveniencia", sostuvo.

SE FISCALIZA MÁSPor otro lado, Torrado refirió que los estudios de Datum demuestran que cada vez la población busca más información y quiere saber más sobre los candidatos. La gente ya empieza a investigar a los aspirantes presidenciales en Internet y en las redes sociales; buscan sus currículums, su trayectoria, sus propuestas o hasta posibles denuncias.

"La decepción política para una parte del electorado es muy grande; hay un descontento que se ha ido alimentando en los últimos años y ha hecho que el elector peruano sea más desconfiado y escéptico, y lo demuestra buscando información y fiscalizando al candidato", finalizó.

TENGA EN CUENTA

  • Según un estudio del JNE sobre el perfil del elector peruano, los medios de comunicación masiva son los que más influyen en el voto de los ciudadanos.
  • No obstante, la mayoría de electores considera que su familia y amigos ejercen alguna influencia al momento de votar.
  • Las redes sociales, aunque en el último año aumentaron su nivel de influencia, aún no destronan a los medios tradicionales.

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