/getHTML/media/1229342
Nicolás Yerovi: "Celebramos la sobrevivencia"
/getHTML/media/1229339
Fernán Altuve: "¿Presentar candidato de 87 años se puede considerar estabilidad?"
/getHTML/media/1229338
Orgullo de ser peruano: ¿Qué nos hace sentirlo?
/getHTML/media/1229336
Nancy Arellano sobre Elecciones en Venezuela: "Esta no es una elección tradicional"
/getHTML/media/1229265
Zelmira Aguilar: "Alejandro Villanueva creó el estilo de juego de Alianza y Selección"
/getHTML/media/1229195
Cherman: "Quien me quiebra el lado patriótico fue Juan Acevedo con Paco Yunque"
/getHTML/media/1229190
Marco Poma CEO de Tkambio: "Perú está atrasado en materia de 'open banking'"
/getHTML/media/1229009
Javier Arévalo, escritor: "Sin bibliotecas, el hábito de leer no nace en los niños"
/getHTML/media/1228674
Mujeres Aymaras sorprenden con su arte en Desfile de Modas
PUBLICIDAD

Welcome to the jungle

Una de las barras más creativas de la ciudad es la de Amaz, el restaurante de Pedro Miguel Schiaffino. Pero no solo beba, también coma (y goce).

Imagen
Amaz está en la Av. La Paz 1079, Miraflores. Atiende todos los días, almuerzo y cena; domingos, solo almuerzo.
Fecha Actualización
En los círculos culinarios hay unanimidad: una de las mejores y más innovadoras coctelerías peruanas se está desarrollando en Amaz, el restaurante de Pedro Miguel Schiaffino.

Allí, Luis Flores Benites, joven pero experimentado barman (ha pasado por las barras de Malabar y Maido), bien guiado por Schiaffino, y con los insumos que da nuestra generosa selva, ha elaborado cocteles que sorprenden. Primero, por sabrosos; segundo, por sus 'exóticos' ingredientes, y tercero, porque son sinceros, sin artificios. Hoy, que la técnica y la forma se imponen sobre el fondo, uno agradece que, así como hay una 'cocina de ingrediente', haya una barra con la misma filosofía.

Flores nos presentó cuatro cocteles: 1. Arazeli (en la foto principal), que lleva sake, vodka, jugo de guayabas brasileñas (arazá le dicen en Iquitos), manzanilla y bitter de naranja. El coctel es cítrico, fresco, consistente. 2. Tongoro es una buena alternativa al tradicional capitán. Lleva vermouth, aperol, gin y uva borgoña traída de Tarapoto. 3. Sheretero es un shot de tequila y Grand Marnier que se sirve con panela y carambola verde. Créanos, la experiencia es mejor que la vivida con un silvestre shot de tequila. 4. El fratello loretano no está en la carta, pero no debe perderse la experiencia de beber este trago seco, con cuerpo y muy refrescante.

¿Y para picar? El arroz chaufa con plátano y cecina es tan bueno que repetirá, al igual que los maduros de Doña Eli. Provecho.