/getHTML/media/1239666
Eduardo Pérez Rocha: "Que la Policía diga la verdad, Vladimir Cerrón se fue del país"
/getHTML/media/1239537
José Baella sobre caso Vladimir Cerrón: "Se debería investigar la contradicción de la Policía"
/getHTML/media/1239536
Fuad Khoury: "No es el momento para invertir en aviones de guerra"
/getHTML/media/1239269
Impulsared: el programa que promueve el desarrollo a través del emprendimiento
/getHTML/media/1239371
Romy Chang sobre 'Chibolín': "La caución asegura la permanencia de Elizabeth Peralta"
/getHTML/media/1239361
José Carlos Mejía, abogado de agente 'Culebra' habla sobre supuesto atentado: "Han sido dos extraños incidentes"
/getHTML/media/1239253
Dina Boluarte endeudará al Perú por S/ 7,500 millones para comprar 12 aviones de combate
/getHTML/media/1239252
Adrián Simons: "Tipificar terrorismo urbano no soluciona nada"
/getHTML/media/1239251
Todo lo que debes saber sobre el sorteo 'Escapada de Primavera'
/getHTML/media/1239126
Gobierno de Dina Boluarte sin rumbo ante criminalidad | La Voz del 21
/getHTML/media/1239123
Víctor García Toma: "El JNE debió anular la inscripción de A.N.T.A.U.R.O"
/getHTML/media/1239120
Mariano González: "Este gobierno-Dina Boluarte- representa más al crimen que a los peruanos"
/getHTML/media/1239127
Malena Morales de Alicorp y su compromiso con los emprendedores peruanos en Marcas y Mercados
/getHTML/media/1238304
Los mejores libros del siglo XXI según The New York Times | Biblioteca de Fuego
/getHTML/media/1238207
118 mujeres han sido víctimas de feminicidio en lo que va de 2024
PUBLICIDAD

Punto para el terrorismo

El ataque al aeropuerto de Kiteni, en el que se destruyeron tres helicópteros de la empresa Transportadora de Gas del Perú (TgP), ha significado un punto para el terrorismo y, en particular, para las huestes del camarada ‘Gabriel’ (Martín Quispe Palomino).

Imagen
Fecha Actualización
Guido Lombardi,Opina.21glombardi@peru21.com

Ese ataque demuestra –como si no fueran suficientes las 18 muertes que ya han ocasionado en la zona– que la captura de los líderes de la subversión en la última década del siglo pasado no supuso el fin del fenómeno terrorista en nuestro país.

Como ha señalado el general Otto Guibovich, existe grave responsabilidad del Consorcio Camisea, que solicitó la desmilitarización de la zona luego del secuestro de 36 de sus trabajadores. Pero más grave aún resulta la responsabilidad del Gobierno, que accedió a tal requerimiento.

No se trata, sin embargo, de buscar responsables, y menos de aprovechar políticamente la penosa circunstancia, sobre todo si tenemos en cuenta que está en riesgo el abastecimiento energético del país.

Es la ocasión, como sucedió después del atentado de la calle Tarata, de mostrar la unidad de todas las fuerzas políticas democráticas frente al objetivo común de derrotar al terrorismo reorganizado.

Quienes piensan que la solución es estrictamente militar están equivocados y repiten la falta de visión de los años 80. Tampoco puede pensarse que resolveremos el grave problema por la vía legislativa y, por esa razón, es preocupante la afirmación del presidente de la República hecha el lunes pasado.

Consolidar la pacificación del país supone luchar políticamente contra las huestes de los Quispe Palomino. Estamos frente a un desafío político y social, más que militar o legislativo, y el primero que debería comprenderlo es el presidente Humala.

Tiene razón la congresista Marisol Pérez Tello cuando sostiene que al terrorismo no se le combate con una ley, sino desde diferentes perspectivas.