Radicales politizan la fiesta de la Virgen de la Candelaria de Puno

En esa ocasión, Ccallo anticipó también que mañana sábado 3 de febrero, su grupo se reunirá para acordar su próxima agenda de protestas, que tiene entre sus principales demandas la renuncia de la presidenta Dina Boluarte e impedir su llegada a la ciudad altiplánica, el cierre del Congreso y la convocatoria a una asamblea constituyente.

“Estos señores de la Policía Nacional han causado una cruel masacre, un asesinato al pueblo y, por lo tanto, no cabe su participación en esta festividad religiosa y costumbrista”, sentenció Ccallo, al tiempo de insistir en responsabilizar a la institución policial de los 18 muertos en las protestas contra el Gobierno tras el golpe de Pedro Castillo. También se comprometió a apoyar la marcha convocada por la ‘Asociación de Mártires y Víctimas del 9 de enero’, integrada por familiares de los fallecidos en enero de 2023 cuando intentaron tomar el aeropuerto de Juliaca. Este respaldo se concretó precisamente el último miércoles 31, cuando el grupo llegó hasta el frontis de la sede del Comando Regional de la Policía de Puno para reclamarle que se inhiba de participar en las festividades de la Candelaria.

Perú21 intentó sin éxito comunicarse con la Federación del Folklore y Cultura de Puno que organiza la Festividad de la Virgen de la Candelaria —que ha sido declarada como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco—, para saber su postura respecto a esta irracional decisión anunciada por Ccallo, cabeza visible en Puno del Movadef, fachada política del genocida ‘pensamiento Gonzalo’.

El exdirector de Comercio Exterior y Turismo del Gobierno Regional de Puno (Dircetur) y actual funcionario de esa oficina, Vadim Masciotti, en tanto, dijo a este diario que la demanda “politiza” la fiesta religiosa, y no descartó que de participar la comparsa policial en las actividades se registren incidentes, específicamente los días sábado 10 y domingo 11, fechas en las que se realizarán los concursos de bandas y trajes de luces. Esa preocupación se sustenta, además, en las declaraciones de los familiares de los fallecidos en las protestas.

Ayer, entre tanto, arribó a Puno la ministra de Cultura, Leslie Urteaga. Lo hizo un día después del anuncio de la presidenta Dina Boluarte de que una comitiva ministerial llegaría a la región para impulsar una serie de proyectos que demanda la población.

Urteaga informó que llegó a Puno por invitación de la prefecta Kateryn Guerra, y también como parte de la obligación que tiene el Estado de estar presente en esta importante fiesta religiosa. Sin embargo, a su salida de la ceremonia realizada en la plataforma deportiva de Arco Deustua fue blanco de las pifias de algunos asistentes. “Dina asesina”, “corrupta”, le gritaron, por lo que tuvo que abandonar el lugar, fuertemente resguardada por efectivos policiales. En horas de la tarde abandonó Puno, no se informó si retornó a Lima.

Antes de irse, sin embargo, al consultársele si otros ministros llegarán a la zona respondió que no tenía información al respecto. “Ojalá se pueda porque es una fiesta de hermandad, de unión, en la que la Virgen de La Candelaria nos llama a la reflexión para superar algunas crisis y dificultades”, acotó.

-Lucio Ccallo es también vocero de la Coordinadora Nacional Unitaria de Lucha (CNUL) que, tal como lo ha revelado Perú21, ha organizado las protestas en Lima y Puno desde julio de este año.

-El primer ministro Alberto Otárola ha descartado que la jefa de Estado viaje a Puno como lo dejaron entrever otros miembros de su gabinete.