[Opinión] Sonia Chirinos: Queda mucho por hacer, pero hay que hacerlo

Se acaba de celebrar el Día Internacional de la Mujer Trabajadora.

El 8 de marzo de 1909 fue la fecha que eligieron las mujeres en Estados Unidos para reivindicar sus derechos laborales. En ese ambiente y en esos días, ocurrió un suceso terrible. Una fábrica de Nueva York se incendió. Más de 100 mujeres, la mayoría inmigrantes, murieron quemadas porque el patrón tenía cerradas las puertas del edificio.

Es triste que 100 años después y cuando las mujeres del mundo occidental creemos que hemos alcanzado nuestros derechos a plenitud, todavía vivamos, a poco que rasquemos la realidad, en una situación no muy distinta a la pretérita.

En España, por poner un ejemplo, la diferencia salarial entre hombres y mujeres es nada menos que del 24%. No es una especulación. Son datos oficiales.

Se acometen medidas para reducir la brecha salarial, pero, como digo, las últimas estadísticas resultan desconcertantes. En cualquier caso, me interesa destacar que, aquí, el permiso de paternidad es obligatorio. Cuando lo era en exclusiva para las mujeres, suponía una rémora para las profesionales jóvenes por el temor a que pudieran quedar embarazadas. Ahora los hombres jóvenes también se sienten rechazados si hay expectativas de que estén en proceso de crear una familia. Ironías de la vida.

Si en 1909 las mujeres luchaban por la igualdad salarial. Si las peor tratadas eran entonces, (como lo son hoy) las inmigrantes. Si hogaño como antaño las mujeres en el trabajo sufrimos acoso o humillación de partes de nuestros superiores, hay que concluir que queda mucho camino por hacer. Pero no hay que rendirse. Y señalar con decisión las desigualdades que sufrimos, por nimias que parezcan.