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[Opinión] Camila Bozzo: Las paradojas de Torre Tagle

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[Opinión] Camila Bozzo: Las paradojas de Torre Tagle
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Es una paradoja preñada de un humor mordaz que Torre Tagle, quizás la Cancillería que concita el mayor prestigio en Latinoamérica (acaso con la de México), termine siendo conducida por Héctor Béjar, un exguerrillero y admirador de las dictaduras cubana y venezolana. Un personaje que no solo no tiene experiencia diplomática, sino que, como advirtió ayer en su columna mi vecino Aldo Mariátegui, declaró en una entrevista en 2018 que la política exterior peruana es “una basura”.
Lo que nos espera bajo su liderazgo, y la orientación radical y autoritaria del tándem gubernamental Castillo-Cerrón, es un giro lamentable en la política diplomática del país, conducida hasta hoy con eficiencia, profesionalismo y moderación. En el nuevo derrotero diplomático prevalecerán los criterios ideológicos antes que el pragmatismo, la estabilidad y el bienestar del país. Pronto nos uniremos al cacareo rectilíneo de los populismos bolivarianos que enaltecen el nacionalismo antiimperialista. Es, pues, una paradoja trágica que, habiendo atravesado el umbral del bicentenario, y después de 200 años de bregar por la construcción de una Cancillería institucional, corramos el riesgo de caer en el abismo de la diplomacia trapichera, como ya lo hicieron otros países de la región.
Ayer Béjar anticipó que reforzarán las relaciones con Venezuela. Además, su prematura reunión con el canciller venezolano y su desconocimiento del embajador nombrado por Guaidó son solo algunas señales de la línea que la Cancillería asumirá.
En el esfuerzo reciente por fortalecer el servicio diplomático se consagró el principio de obediencia debida en la ley del Servicio Diplomático para permitir a los funcionarios diplomáticos no acatar órdenes inconstitucionales o ilegales. Más allá de su orientación ideológica, este gobierno ha demostrado tener aspiraciones autoritarias, y si efectivamente termina asumiendo posiciones que transgreden la institucionalidad democrática, nuestros funcionarios pueden hacerle frente.
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