De acuerdo con el Grupo Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC por sus siglas en inglés), una organización internacional de expertos, la temperatura global no debe aumentar más de 1.5 °C para fin de siglo, de lo contrario, las consecuencias serán catastróficas. Al ritmo que va el planeta, es probable que el límite se supere mucho antes. Por ello, una nueva visión, más ecológica, empieza a tomar forma, e incluye —por qué no— construir viviendas “ecoamigables”, lo cual es posible gracias a la tecnología de impresoras 3D.