Si orinas en las calles de España terminarás salpicado con tu propio líquido

Los orines impregnados en las paredes de las calles no resultan solo un problema que viven los limeños a diario, también los sufren los habitantes de otras ciudades en el mundo. Sin embargo, en Pamplona, España, todo indica que están cerca a encontrar una solución, la cual tendrá su prueba de fuego en la fiesta de San Fermín.

La advertencia es simple: Si osas orinar en una de los muros, puedes terminar cubierto con tus propios malolientes líquidos. ¿Alguien se atrevería a hacerlo?

Es que según indica El diario de Navarra, durante San Fermín los maleducados ciudadanos suelen multiplicarse por mil regando las calles de Pamplona con su inmundicia. Es por ello que la alcaldía ha optado por colocar sus esperanzas en un novedoso producto: CK-Splash Back.

¿DE QUÉ TRATA?El CK-Splash Back es el nombre con el que se llama a este líquido que sirve de repelente para las paredes. De esta forma quedan inmunes a absorber el agua (o algún cualquier otro tipo). Se aplica fácilmente con un rociador (como las mochilas portátiles para fumigar).

San Fermín atrae a miles de turistas cada año. (AFP)

"Ck-Splash Back consigue que la orina rebote en la fachada y que la persona que orine se moje el pantalón y los zapatos", señala un más animosa y vengativa descripción del producto en su página web.

Sin embargo, desde el Ayuntamiento de Hernani, donde ya han probado el CK-Splash Back, son más prudentes. "El producto impermeabiliza la pared y, como ésta no se llega a impregnar, la orina salpica un poco más. Es como si aplicases una película de aceite sobre una superficie: al echar después un líquido sobre ella, rebota más de lo normal", señala Iñaki, responsable de servicios públicos, a Verne.

"El efecto de nuestro producto funciona a dos niveles", apunta Beñat Ortiz de Zárate, responsable de marketing de Kliner Profesional, tiene un carácter disuasivo y además logra que la superficie permanezca limpia más tiempo.

Hamburgo, en Alemania, también fue sede de un experimento similar, también con los mismos fines: acabar con los 'meones'.

En Hamburgo se usó un líquido que tenía el mismo fin.

La Fiesta de San Fermín, que se lleva a cabo del 6 al 14 de julio y en la cual la ciudad pasa a tener cerca de 1 millón de habitantes, será un duro examen para este producto. El Ayuntamiento de Pamplona informó que se rociará el líquido en las zonas más 'calientes' de la ciudad, como por ejemplo las calles del Casco Viejo.

"Todo el feedback que hemos recibido de los ayuntamientos con los que llevamos años trabajando nos confirma que es un éxito", afirma Beñat, quien agrega que por ahora el producto solo es ofrecido a municipalidades e instituciones.