Otros países de la región también son afectados por la gripe aviar

El Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) de Perú informó que el principal riesgo que existe con la influenza aviar es la transmisión propiamente entre ave y ave, porque es un virus altamente mortal.

Según esta institución, la enfermedad se está transmitiendo de aves silvestres que provienen de norteamérica y llegan hasta la Patagonia.

Según cifras del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor), Perú registra 13.869 aves marinas, en su mayoría pelícanos, muertas a causa de la influenza aviar H5N1 en parte de su costa y áreas naturales protegidas.

La situación en Ecuador es similar a la peruana. Las autoridades declararon la emergencia zoosanitaria por 90 días tras la detección de un brote de influenza aviar en granjas del país, según AFP.

El Ministerio de Agricultura y Ganadería informó que durante esos 90 días no se podrá movilizar aves, productos y subproductos de origen aviar como huevos, gallinas, pollos, entre otros, de las granjas afectadas por el brote.

Pese al brote, el ministro de Agricultura, Bernardo Manzano, señaló que “el consumo de huevos y carne de pollo están garantizados”.

A finales de octubre, la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) reportó la aparición del virus de la influenza aviar en Colombia, em el municipio de Acandí, fronterizo con Panamá, según informa El Comercio.

En su informa, la entidad indica que “el origen probable de la infección corresponde al contacto de aves domésticas que no son de corral con especies de aves silvestres de la familia Anatidae, especie Spatula discors, así como otras especies de aves silvestres migratorias y nativas que están en proceso de observancia para identificación”.

A mediados de noviembre, las autoridades colombianas declararon la emergencia sanitaria en el territorio nacional por la presencia de la gripe en aves domésticas de traspatio.

El Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) informó que la presencia de la enfermedad en Colombia no pone en riesgo la producción ni el consumo nacional de huevos y carne de pollo.

Debido a la cantidad de casos de gripe aviar en Ecuador, Perú, Colombia y América del Norte, Argentina se encuentra en estado de alerta por su posible ingreso, sobre todo por el efecto que podría tener en la producción de pollos y huevos.

“Es esperable que las aves migratorias continúen transportando este virus a otras regiones del continente”, así lo afirmó la médica veterinaria Ximena Melón, directora nacional de Sanidad Animal del Servicio Nacional de Sanidad Agroalimentaria (Senasa), al diario Perfil.

En Argentina la gripe aviar jamás estuvo presente.

“Si la enfermedad es detectada tempranamente, apenas llega al país, las medidas de contención permiten evitar al máximo que involucre a las aves comerciales. Las medidas de bioseguridad que deben aplicar los productores y las granjas previenen el ingreso a las aves comerciales”, añadió Melón.

La gripe aviar ha acabado con 50,54 millones de aves en Estados Unidos durante el 2022, convirtiéndose en el brote más mortífero de la historia del país, según datos del Departamento de Agricultura (USDA, por sus siglas en inglés).

Las pérdidas de aves de corral ocasionaron que los precios de los huevos y la carne de pavo (murieron ocho millones) se eleve a niveles récord.

“Las aves silvestres continúan propagando la influenza aviar altamente patógena por todo el país a medida que migran, por lo que evitar el contacto entre las parvadas domésticas y las aves silvestres es fundamental para proteger las aves de corral estadounidenses”, dijo Rosemary Sifford, directora veterinaria del USDA, según Euronews.

La gripe aviar es una enfermedad viral altamente contagiosa que afecta tanto a las aves domésticas como a las silvestres. Aunque con menos frecuencia, también se aislaron virus de influenza aviar en especies de mamíferos, así como en seres humanos.

En las aves, el virus de la gripe aviar se elimina en las heces y las secreciones respiratorias, y puede transmitirse a través del contacto directo con las secreciones de las aves infectadas o indirecto, a través de los piensos (alimento) y el agua contaminados. Debido a la naturaleza resistente del virus de la influenza aviar en el medio ambiente, incluida su capacidad para sobrevivir durante largos períodos a muy bajas temperaturas, también puede propagarse fácilmente de un establecimiento al otro.