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Fue condenado a cadena perpetua por un sujeto que mintió para acusarlo injustamente a cambio de drogas y sexo

La condena de Willie Stokes, un hombre afrodescendiente sentenciado injustamente a cadena perpetua por un asesinato, dio un giro inesperado luego que el testigo que lo acusó de haber matado a un hombre confesara que fue sobornado por dos detectives para mentir en su declaración; todo con el fin de hallar a un culpable.

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En 2015, décadas después de haber sido sentenciado, Willie Stokes se enteró del falso testimonio por lo que solicitó a su abogado apelar la condena por asesinato. (Foto: CBS Philly)
Fecha Actualización
La condena de Willie Stokes, un hombre afrodescendiente sentenciado injustamente a cadena perpetua por un asesinato, dio un giro inesperado luego que el testigo que lo acusó de haber matado a un hombre confesara que fue sobornado por dos detectives para mentir en su declaración; todo con el fin de hallar a un culpable.
Después de 37 años en prisión, Stokes fue liberado este martes por un magistrado estadounidense, quien calificó la sentencia inicial como una “violación atroz de los derechos constitucionales”, aseguró el New York Post.
Franklin Lee, el testigo del caso, acusó durante una audiencia en mayo de 1984 a Willie Stokes, ahora de 61 años, de haber asesinado en 1980 a Leslie Campbell durante un juego de dados. Este testimonio falso fue planeado por dos detectives, ahora muertos, para cerrar este caso de homicidio.
A cambio de esta mentira, los oficiales le ofrecieron a Lee un trato especial que incluía drogas y sexo durante su estancia en la cárcel. El sujeto estaba acusado por cargos de violación y asesinato no relacionados con el caso; por lo que también le prometieron ayuda para reducir su condena.
“Me debilité y acepté la oferta”, dijo Lee ante un juez federal en noviembre del año pasado.
No fue hasta agosto de 1984 que Lee se retractó de su declaración; sin embargo, Stokes ya había sido sentenciado meses antes, por lo que fue llevado a la cárcel sin enterarse que lo culparon injustamente.
“Una vez que hablé con mi madre, ella me dijo: ‘No te crié así, para mentir sobre un hombre porque te metiste en un lío’”, declaró Lee en su testimonio. “Ella dijo: ‘No me importa si te dan 1,000 años. Entra y di la verdad. Y eso es lo que hice “, lamentó.
Los fiscales de Filadelfia acusaron a Lee de perjurio. Fue declarado culpable después de admitir que se había inventado la confesión y lo sentenciaron a una pena máxima de siete años de prisión.
En 2015, décadas después de haber sido sentenciado, Stokes se enteró del falso testimonio por lo que solicitó a su abogado apelar la condena por asesinato.
“Los fiscales de homicidios que utilizaron el testimonio de Franklin Lee para condenar a Willie Stokes luego lo procesaron por mentir sobre el caso de mi defendido y nunca le dijeron nada”, argumentó Michael Diamondstein, abogado de Stokes en la audiencia de noviembre en la corte federal.
Stokes salió de una prisión estatal en Filadelfia el último martes y fue recibido por su madre y familia.
“Hoy es un día tremendo. Estamos todos muy agradecidos”, dijo su abogado, Diamondstein. “Sin embargo, también es un día triste, porque nos recuerda lo ilegal, injusto e injusto que fue la aplicación de la ley en Filadelfia durante tanto tiempo”.
En 2019 Lee salió de prisión luego de cumplir 35 años por cargos de violación, asesinato y perjurio.
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