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“Maté a mis papás y hermano con una escopeta”, confiesa adolescente al que no le dieron PlayStation

El adolescente puede ser imputado porque tiene más de 14 años, pero no ir a prisión, porque tiene menos de 18.

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Un castigo por las malas notas habría sido el detonante para que el menor de 15 años asesinara a sus padres y a su hermano de 10 años. (Foto: getty images)
Fecha Actualización
Un adolescente de 15 años fue detenido en España como sospechoso de haber matado a tiros a sus padres y a su hermano de 10 años el pasado martes 8 de febrero tras un castigo por las malas notas del colegio, informó la Policía el sábado. El incidente no fue descubierto hasta el viernes por una familiar que acudió a ver cómo estaban, indicó un portavoz de la policía.
“La hermana de la madre acudió a la casa porque no tenía noticias de la familia y fue entonces cuando su sobrino le dijo que había matado a su padre, a su madre y a su hermano”, explicó un portavoz de la policía a la AFP.
La policía encontró los cuerpos sin vida en el interior de la casa y detuvo al adolescente, quien llevaba tres días solo en la casa con los cadáveres.
El joven relató a la Policía que su madre, Encarnación de 52 años, le dijo que era “un vago, que ya estaba bien”: “Me iba a quitar la consola (PlayStation). Subí a mi habitación, me puse a pensar y agarré la escopeta”.
El adolescente, quien responde al nombre de Santiago, fue a buscar el arma a un cobertizo que hay junto a la vivienda, localizada en Alicante, volvió a la casa y se acercó a la mamá: “Disparé dos veces a mi madre cuando estaba en la cocina. Un tiro por la espalda y luego la rematé”.
Las detonaciones alertaron a su hermano de 10 años, que emprendió la huida: “Mi hermano intentó escapar, pero salí detrás de él y lo cacé antes. Esperé a mi padre cuatro o cinco horas y le disparé al llegar”.
Fuentes cercanas a la investigación han precisado que el hombre alcanzó a decirle a su hijo: “Pero qué haces”. Tras el crimen, el joven trasladó los cadáveres de su familia a un cobertizo y estuvo tres días conviviendo con ellos.
El adolescente ha sido recluido en el centro de menores en el que podrá pasar a la cárcel cuando llegue a la mayoría de edad.
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