Un pedacito de México en Barranco

#ProductoLocalCorazonMexicano es el hashtag que los identifica en Instagram. La tiendecita ofrece tortillas hechas a mano nixtamalizadas por docena, queso Oaxaca por peso, salsas varias, desde la roja de tomate con chile de árbol y ají limo hasta el ‘Nomas no llores’, la súper picante para los amantes del fuego.

El local es pequeño, pero acogedor. Empezamos con las bebidas. Un Clamato mamalón, que es una cerveza mexicana servida en vaso escarchado con chile en polvo acidulado, jugo de limón, salsas negras y jugo de tomate-almejas, una opción buenísima para hacernos una idea de lo que México tiene para nosotros. Se puede elegir agua de jamaica o tepache de piña y tamarindo.

Lo que sigue es Guacamole, una emulsión de aguacate, tomates de chacra, frutas de temporada, hierbas aromáticas y tostadas de cilantro. Buen inicio.

Seguimos con el Aguachile de langostinos zarandeados con salsa marisquera de un chilito muy especial del noroeste de México llamado Chiltepin. Continuamos con una variedad de tacos. La carta es pequeña, pero llena de gratas sorpresas para quienes hemos disfrutado de la gastronomía mexicana.

“Este lugar ya es México”, dice Macías, orgulloso de su emprendimiento. Abrieron hace cuatro meses y el público los ha recibido muy bien. “No es fusión. Es comida mexicana”, remarca. Y agrega: “Nos basamos en insumos locales. Las tortillas se hacen de maíces ayacuchanos, los ajíes son peruanos. Traemos cositas como mezcal y chiles secos. Nuestra inspiración se basa en todas las regiones y la temporalidad de productos peruanos que son increíbles”.

Emilio Macías es chef desde niño, trabajó en Astrid & Gastón, entre otros restaurantes, y ahora se muestra feliz de traer sus sabores y su casa al Perú.