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Se hizo victoria nuestra gratitud [CRÓNICA]

Todos compartíamos el mismo anhelo. Usar la casaquilla de la selección era motivo suficiente para poder conversar de manera amena con cualquier extraño. En la Madre Rusia, no eramos desconocidos, eramos hermanos unidos por los colores de un país.

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(GETTY)
Fecha Actualización
Habían pasado 36 años para que Perú vuelva a disputar el evento deportivo más importante del mundo. ¿Qué eran 72 horas seguidas sin dormir? Después de tres días de viajes, volví a tocar una cama, pero no pude conciliar el sueño. La imagen de lo que sería el Mordovia Arena de Saransk pintado de rojo y blanco no salía de mi cabeza. 
Aquel 16 de junio de 2018, la pequeña ciudad rusa fue tomada por una legión de peruanos. Mi corazón latía más de lo normal. Asomé la cabeza por la ventana del departamento que había alquilado tras escuchar algunos murmullos en español: eran compatriotas. 
Todos compartíamos el mismo anhelo. Usar la casaquilla de la selección era motivo suficiente para poder conversar de manera amena con cualquier extraño. En la Madre Rusia, no fuimos desconocidos, fuimos hermanos unidos por los colores de un país.
En el tren, el aeropuerto, las calles, los buses, era muy difícil no encontrar a un peruano. Nos quedamos con ganas de más Mundial y el Mundial se quedó con ganas de más de nosotros. Siempre fuimos locales y nuestro aliento se hizo digno de admiración en el planeta entero.
Como si se tratase de una estrella de rock, los rusos hacían que me detuviera en cada cuadra para tomarse una foto conmigo. Saranks jamás había gozado tanta pasión por el fútbol y era evidente su intención de sumarse a nuestra fiesta. 
Parecíamos niños llegando al primer día de escuela. Una marea roja y blanca se formó camino al Mordovia Arena. Compatriotas de todo el mundo llegaron hasta el coloso ruso (para algunos, era su primera vez fuera del Perú). La historia se repitió en Ekaterimburgo y Sochi. Estábamos de regreso y lo hicimos saber.
La bicolor disputó solo tres partidos, pero eso fue suficiente para llamar la atención del mundo. Con el himno nacional y 'Contigo Perú', que significó  dimos una lección de cómo ser hincha.
La selección es de todos. Es del que siempre estuvo ahí y también del que nunca creyó, del que fue al estadio siempre y del que fue a veces, del que lo vio por televisión y del que estuvo Rusia. Bajo esta premisa de unión, logramos ser uno solo. Por fin, se hizo victoria nuestra gratitud.
PODEMOS HACERLO
Tras nuestra grata presencia en el Mundial, la hinchada peruana compite en la categoría Premio a la afición de The Best FIFA, reconocimiento a la  apasionada hinchada bicolor, que se está jugando un partido aparte en las votaciones en línea del concurso.
Para votar por la afición nacional, solo debes ingresar a www.fifa.com/the-best-fifa-football-awards hasta el mismo día de la premiación, el 24 de setiembre de 2018.