Carmencita Lara: Como hoja que el viento arrebata

Las melodías melancólicas del acordeón y la guitarra son el preludio a una desgarradora voz que recita conmovedoras canciones sobre el amor no correspondido, el despecho y la pérdida. Si existe algún artista que ha expresado nuestras penas con tal exactitud en su interpretación, fue Carmencita Lara, la dama de las canciones tristes. La intérprete falleció ayer, en la madrugada, a los 91 años y deja a su paso una gran huella en la música peruana.

ALMA DE MI ALMA
Natural de Paiján, en La Libertad, Julia Capristán García emigró a Lima para trabajar como costurera. Empero, su vocación por la música se impuso y desde los 15 años incursionó como cantante. El destino la llevó a que en 1948 conociera a Víctor Lara, cuando buscaba un profesor de piano. En él halló el amor y al creador de su nombre artístico: Carmencita Lara.

“Mi esposo arreglaba las canciones. Escogía el tema. La palabra que no le gustaba, la quitaba y ponía otra. Por eso hemos triunfado. Me dio bastante ánimo para vivir”, declaró Carmencita Lara en un reportaje de 'Cuarto poder'. Víctor tocaba, además, la inconfundible melodía del acordeón que suena en sus canciones.

“Tenía un gran sentimiento para cantar. Su arte es especial por su timbre de voz inigualable. Junto a mi padre, hicieron un estilo propio, muy sentimental, que gustaba mucho al público del Perú y Latinoamérica”, señaló Rosario Lara a Perú21 con una voz afligida y preocupada tras la muerte de su madre.

Asimismo, Rosario Lara nos comentaó que su madre le enseñó a cantar desde los 7 años. "Ella fue siempre mi maestra. Desde que era pequeña. En la actualidad mi hermana Rochi y yo hacemos los shows con su música. Continuamos su legado para que su música continúe vigente", nos indicó. 

En lo que respecto a la salud de Víctor Lara, Rosario nos indicó que se encuentra enfermo de cáncer y "está avanzado". "Con la bendición de Dios está estable. Se encuentra consternado por la muerte de mi mamá pero ya está un tanto tranquilo", nos dijo Rosario Lara por teléfono. 

“La particularidad de Carmencita es que era de un circuito distinto al de los grupos criollos de ese entonces. Es una cantante que viene de provincia y vivía en un barrio obrero de los años 50 y 60 de Lima. Y se volvió muy popular por todo el país”, nos explicó el antropólogo Fernando Ríos.

El especialista subraya que Carmencita Lara es importante por haberse vuelto un símbolo de orgullo en Comas, donde ella y su esposo fueron profesores de música por 18 años, en el colegio EE.UU. “No es común encontrar un barrio, considerado de la nueva Lima, que tenga como uno de sus personajes más célebres a una cantante de música criolla”, remató.

"Hace como 4 años publiqué un artículo en El Panfleto sobre Carmencita Lara y la mitad de comentarios se referían a ella "La profe". La recordaban barriendo por su casa. Esa es una de las cosas más interesantes y desconocidas: no era la cantante sino la profesora de colegio y vecina de Comas. Y no hay mucha información de ese lado de su vida", nos dice Ríos. 

Por otro lado, Fernando Ríos considera a "Olvídala, amigo" como su canción preferida de Carmencita Lara. "Es increíble que uno vaya a fiestas, no miraflorinas, sino lugares como Vichama en el Centro de Lima, y que gente de la (Universidad Federico) Villareal  y de la San Marcos estén cantando a las 2 a.m. canciones de Carmencita. Y todos la conocen desde su niñez", nos comentó. 

“Ya me voy a otras tierras lejanas... a un país donde nadie me espera...”, cantaba Carmencita Lara en “Despedida”. Y así nos dejó, como una hoja que se lleva el viento.

DATO: 
- Entre las canciones más populares de Carmencita Lara están "Cementerio”, “Llora, llora corazón”, “El árbol de mi casa”.

- El Ministerio de Cultura otorgó a Carmencita Lara la distinción de Personalidad Meritoria de la Cultura en 2011 por la difusión de nuestro arte.