“Si me dolió, sufrí y lloré, pero siempre trato de entender por qué pasan las cosas... Ella me pidió perdón y yo la perdono porque nadie es perfecto y porque es mi madre. Al final, soy Alejandra Baigorria Alcalá por los dos, por mi mamá y papá. Ella fue una mujer maravillosa y sé que lo volverá a ser”, manifestó.