(Andina)
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Redacción PERÚ21

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El domingo 5 de junio se llevará a cabo la segunda vuelta para elegir al próximo presidente del Perú entre los candidatos , de Fuerza Popular, y , de Peruanos por el Kambio (PPK).

Si bien un gran número de analistas y parte de la población consideran que no hay muchas diferencias en las propuestas de ambos candidatos, porque son pro mercado y planean continuar con el modelo económico actual, Perú21 ha recopilado las propuestas más importantes de sus planes de gobierno y conversó con dos especialistas para analizar su factibilidad.

FALTA EL CÓMOLa economista Patricia Teullet afirma que en materia de empleo saluda la propuesta de PPK de crear 3 millones de puestos de trabajo formales, ya que empezar con el aumento del sueldo mínimo, como lo propone Fuerza Popular, suena populista cuando millones no tienen acceso a un empleo formal y no se ha incrementado antes la productividad.

En el plano tributario, la economista descalificó la propuesta de Peruanos por el Kambio, que ofrece una amnistía para las deudas anteriores e impuestos prediales de las propiedades a aquellas empresas que se formalicen. Indica que esto sería un castigo para quienes sí pagan a tiempo. Enfatizó que si bien ambos diferencian los tributos en beneficio de las Mipymes, fomentan una administración más compleja y estarían generando fuentes de evasión e incentivos para no crecer, cuando lo que en realidad el Perú necesita son empresas de mayor tamaño.

Asimismo, comentó que en salud e infraestructura sumaría las ofertas de ambos partidos, ya que una mayor cobertura, un mejor trato y la utilización del sector privado son favorables. No obstante, mencionó que a ambas agrupaciones les falta indicar cómo enfrentarán las huelgas que seguro ocurrirían en el sector.

DENTRO DEL MODELOPara Juan Mendoza hay luces y sombras en los planes de Keiko Fujimori y PPK. Indica que es un acierto el compromiso de ambos candidatos de mantener y profundizar la economía de mercado y revertir la caída en la inversión pública.

El economista considera loable el objetivo de Keiko Fujimori de eliminar la desnutrición crónica infantil y garantizar el acceso universal a la atención primaria de salud, pero sería un grave error utilizar el Fondo de Estabilización Fiscal para lanzar un shock de infraestructura, ya que el propósito de este es atender shocks transitorios a las finanzas públicas o desastres naturales.

En el caso de Peruanos por el Kambio, Mendoza simpatiza con las propuestas de implementar reformas estructurales orientadas a mejorar la productividad y aumentar la flexibilidad de la economía frente a los vaivenes del exterior. Sin embargo, tildó de audaz la apuesta de reducir el IGV, ya que si ello no logra atraer rápidamente más contribuyentes, caerá la recaudación tributaria y por lo tanto se complicará el financiamiento de los bienes y servicios públicos. Ante ese escenario, el IGV podría volver a subir, restándole credibilidad a la política fiscal.

METODOLOGÍA

  • Para la elaboración de este informe se tomaron en cuenta diversas propuestas en los temas de empleo, tributos, salud, vivienda e infraestructura.
  • El plan de gobierno de Fuerza Popular se compone de seis bloques: derechos fundamentales y dignidad de las personas; oportunidades y acceso a los servicios; Estado y gobernabilidad; economía, competitividad y empleo; desarrollo regional e infraestructura; recursos naturales y ambiente. Cada uno de estos bloques cuenta con subtemas, en los que se mencionan los problemas y propuestas para cada uno.
  • El plan de gobierno de Peruanos por el Kambio tiene cuatro objetivos: seguridad ciudadana; recuperar el dinamismo económico; lucha contra la corrupción; inversión social. Además, desarrolla cuatro grandes propuestas para contar con un país con mayor bienestar social, más próspero, con mejor seguridad y gobernado con eficiencia, profesionalismo y transparencia.

ANÁLISISJosé Chlimper, Fuerza Popular: Una mitad no hace la tortaUn gobierno de Fuerza Popular no se enfocará solo en reactivar la economía ya que 'la mitad de la receta no hace la torta', este fortalecerá el sistema anticorrupción, la Contraloría General, la Procuraduría, la Defensoría del Pueblo y las compras del Estado.

Proponemos un Ministerio de Economía que no solo controle las finanzas, sino que ayude a mejorar la calidad del gasto en forma productiva y social. Apostaremos por el desarrollo regional, estableciendo SNIP regionales. Regularemos las obras por administración directa con mayor transparencia; modificaremos el sistema de compras del Estado; crearemos una institución de planificación nacional, articulando los tres niveles de gobierno; y cambiaremos el sistema de control de la Contraloría hacia una gestión por resultados.

Promoveremos un boom de inversiones con más infraestructura, además de impulsar los sectores productivos atrapados por temas normativos. Por último, confiamos en el trabajo del BCRP; uno de nuestros objetivos principales será llevar la economía a su tasa de crecimiento potencial y luego mejorarla.

Alfredo Thorne, Peruanos por el Kambio: Crecer a partir de reformasEl objetivo principal es asegurarse de que la economía crezca de manera sostenida a una tasa de 5% y los beneficios de alto crecimiento lleguen a todos.

Para ello tenemos un plan de reactivación económica, un programa de reforma estructural y mejores beneficios sociales a los trabajadores. El primero contiene un plan de estímulo fiscal y estímulo al gasto privado, al consumo y la inversión, así como el destrabe de cerca de US$26,000 millones en proyectos de infraestructura y minería que hoy en día están atrasados.

El programa de reformas estructurales tiene cuatro ejes: (i) formalizar a las empresas y crear más empresarios, (ii) una reforma tributaria, (iiI) un programa de infraestructura y (iv) la modernización del Estado. En el caso de los beneficios sociales, proponemos un seguro de desempleo para los nuevos trabajadores que ingresen al mercado laboral y que en caso de desempleo, cuenten hasta con cuatro meses de cobertura. Pediremos una exoneración a la Ley de Transparencia para ampliar el déficit fiscal a un máximo de 3% hasta el 2019 y financiar los programas.

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