Dani Alves fue condenado a cuatro años y medio de prisión por violar a una joven en España

La sentencia, emitida dos semanas después del final del juicio, establece que los magistrados consideran “acreditado que la víctima no consintió y que existen elementos de prueba, además del testimonio de la denunciante, para entender probada la violación”. Además de la condena de prisión, se le impusieron 5 años adicionales de libertad vigilada, una orden de alejamiento de la víctima por 9 años y medio, y el pago de una indemnización de 150,000 euros (unos 160,000 dólares).

El tribunal, conformado por la Sección 21ª de la Audiencia de Barcelona, detalla en su sentencia que “el acusado cogió bruscamente a la denunciante, la tiró al suelo y evitando que pudiera moverse la penetró vaginalmente, pese a que la denunciante decía que no, que se quería ir” del baño privado de la discoteca Sutton donde ocurrieron los hechos.

En cuanto a la declaración de la víctima, la resolución destaca que “para la existencia de agresión sexual no es preciso que se produzcan lesiones físicas” y que “en el presente caso nos encontramos además con unas lesiones en la víctima que hacen más que evidente la existencia de violencia para forzar su voluntad, con el subsiguiente acceso carnal que no viene negado por el acusado”.

El tribunal subraya la coherencia y persistencia de la declaración de la víctima a lo largo de la instrucción y el juicio oral, considerando sus testimonios como consistentes. Además, señala varias “corroboraciones periféricas” que respaldan el relato de la denunciante, como las lesiones en la rodilla de la víctima, su estado de ansiedad inmediatamente después de los hechos y las secuelas que presenta.

La condena de Dani Alves ha generado conmoción en el ámbito deportivo y social, marcando un precedente importante en la lucha contra la violencia de género.