El mundo ha despertado conmocionado con una trágica noticia. El astro del fútbol argentino, el diez del pueblo, el pelusa, el barrilete cósmico, Diego Armando Maradona falleció hoy miércoles 25 de noviembre de 2020. Todos los amantes del fútbol conocen ese nombre porque es sinónimo del deporte mismo que le dio una fama mundial, y todo el mundo lo recordará siempre por sus hazañas dentro de la cancha. El periodista Mario Fernández es uno de ellos, quien en una entrevista con Perú21 nos cuenta una anécdota que vivió con Maradona.
La historia que compartió el periodista Mario Fernández involucra no sólo a Diego Maradona sino también al exjugador peruano Héctor Chumpitaz. Corrían los años 80s y Chumpitaz, “El Capitán de América”, había jugado un domingo en su equipo el Sporting Cristal. Una lesión lo obligó a internarse en la clínica Ricardo Palma, en Lima. Al día siguiente llegó equipo de Boca Juniors. Entre ellos Ricardo Gareca, hoy entrenador de la selección peruana y el astro argentino Diego Maradona.
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Un colega periodista se puso en contacto con Fernández y le pidió si podía llevarlo a la clínica Ricardo Palma para hacer una nota conjunta de Maradona con Chumpitaz. Fue al hotel Savoy que quedaba en el jirón Callioma y logró convencer al entrenador de Boca Juniors de que el astro argentino saliera con él. Maradona iba a visitar a Héctor Chumpitaz.
“El tumulto que armó en la clínica Ricardo Palma al ver llegar a Maradona fue inmenso”. El periodista cuenta que quiso juntar a los dos cracks del fútbol porque ambos eran inmensamente grandes y había que juntarlos alguna vez. “Hasta los enfermos y los dolidos se levantaron de la cama para ver a Maradona”. Cuenta Mario Fernández cuando llegó a la clínica acompañado de “el pelusa”. Todos querían ver con sus propios ojos al mejor del mundo.
En el cuarto de Chumpitaz estaba también el entrenador de la selección y acompañaba también Ramón Quiroga. Diego Armando entró al cuarto y todos se alegraron con sorpresa. Se acercó al “capitán de América” y le firmó el yeso, imagen que fue captada para la memoria. Cuenta Fernández que Héctor Chumpitaz aún conserva la bota de yeso con la firma del argentino donde escribió “pronta recuperación” y firmó con el número 10.