Trofeo de la UEFA Champions League - AFP
Trofeo de la UEFA Champions League - AFP

POR: ANTONIO HUME

Manchester City

En abril, el Arsenal de Arteta se quedó sin combustible, incapaz de seguir el arrollador ritmo de victorias y efectividad impuesto por los celestes, quienes aguardaban atentos a cualquier desliz londinense. El equipo recuperó la punta de la Premier League, y no la soltó más. Fueron claves la victoria ante los propios ‘Gunners’ y frente al Fullham. Posteriormente, llegó la llave de semifinal, en la que, si bien sufrió en Madrid, los ‘citizens’ no dejaron duda alguna con respecto a su poderío en el partido de vuelta: tras empatar 1-1 en el Bernabéu, la serie terminó 5-1 tras el duelo en el Etihad Stadium, y así, los ingleses avanzaron a la gran final.

El Manchester City venció 4-0 al Real Madrid en la semifinal de vuelta - AFP
El Manchester City venció 4-0 al Real Madrid en la semifinal de vuelta - AFP

Vienen de tres victorias, un empate y una derrota. Sus últimos partidos reflejan, asimismo, un respiro auto concedido, tras ganar la pelea por el título local con el Arsenal y conseguir la FA Cup ante sus clásicos rivales del Manchester United. De imponerse este sábado, podrían cerrar temporada (2022-2023) con un triplete histórico.

Justamente, en medio del empate contra el Brighton y la derrota frente al Brentford, Guardiola admitió: “Nos bebimos todo el alcohol en Manchester… Cuando ganas la Premier League tienes que celebrarlo”. Sin embargo, el 2-1 al United del pasado fin de semana, nos demuestra que el equipo del catalán está listo para pisar el acelerador en cualquier momento, y superar a quien sea que tenga al frente.


Inter de Milán

El presente de los dirigidos por Simone Inzaghi es ligeramente distinto al de sus rivales del sábado. A pesar de un buen inicio, perdieron la pelea por la Serie A meses atrás, pero, como el City, tuvieron éxito en la final de la copa de la liga: vencieron a la Fiorentina por 2-1. Un triunfo que significó la segunda Coppa Italia conseguida por el club bajo el liderazgo de Inzaghi, además las Supercopas del 2021 y 2022.

Simone Inzaghi celebrando el título de la Coppa Italia con los tifossi. - AFP
Simone Inzaghi celebrando el título de la Coppa Italia con los tifossi. - AFP

El equipo parece estar pasando por un momento clave en su historia. El año pasado, a pesar de pelear la liga y haber cosechado resultados importantes, el grupo chino Suning, accionista mayoritario del Inter, puso la institución a la venta. Ahora bien, la economía de un club puede cambiar considerablemente cuando se juega y compite por Champions, y ni hablar de cuando se gana una.

Y es que este año no es uno cualquiera, pues podríamos estar ante una etapa reivindicatoria del fútbol italiano, el cual no gana una final de Champions, justamente, desde la conseguida por el Inter de Mourinho en 2010. Cuando la Juventus –antes de sus problemas con la ley– estuvo cerca de la gloria en más de una ocasión, el resto de los equipos de Serie A no podía competir de igual a igual con sus contrapartes de otras ligas. Esta vez, se gane o se pierda, se puede decir que hubo representantes del calcio en las tres finales de copas europeas: la Fiorentina, la Roma y los negroazzurri.

Trofeo de la UEFA Champions League - AFP
Trofeo de la UEFA Champions League - AFP


El mítico Estadio Olímpico y ‘El Milagro de Estambul’

En el Estadio Olímpico Atatürk de Turquía, se jugará el partido más importante de la temporada regular: la Final de la Champions League. A forma de reivindicación, la UEFA agendó la cita en Estambul, después de haberla reprogramado dos veces, en 2020 y 2021, debido a la Pandemia.

Estadio Olímpico Atatürk, Estambul. - AFP
Estadio Olímpico Atatürk, Estambul. - AFP

El coloso turco será testigo de la máxima definición europea por segunda vez, y es que, en 2005, el Liverpool y el Milan protagonizaron uno de los mejores partidos de la historia del fútbol moderno. Aquella noche, a uno de los grandes equipos que ha visto Europa (Maldini, Cafú, Pirlo, Kaká, Shevchenko, Crespo, entre otras estrellas) le voltearon un partido que ya parecía sentenciado.

Carlo Ancelotti entrenaba al cuadro italiano, el cual, con autoridad, cerró el primer tiempo con una ventaja de 3-0. Pero, desde las tribunas, se escuchó el You’ll never walk alone más fuerte que nunca, el himno del Liverpool que acompañó al equipo en una remontada que aún es relatada de padres a hijos de la ciudad inglesa.

Con más corazón que fútbol, Steven Gerard, Šmicer y un joven Xabi Alonso empataron el marcador, y se llevaron el partido hasta los penales, donde Jerzy Dudek, arquero ‘Red’, estuvo gigante. Los dirigidos por Rafael Benítez, aquella noche de mayo de 2005, gestaron la hazaña futbolística conocida como ‘El Milagro de Estambul’.

Steven Gerard y Rafael Benites, tras ‘El Milagro de Estambul’. - AFP
Steven Gerard y Rafael Benites, tras ‘El Milagro de Estambul’. - AFP


Szymon Marciniak, un árbitro de altas instancias

El polaco de 42 años ya estuvo presente en una final de Champions, como cuarto árbitro en 2018. En la presente edición, dirigió 8 partidos, incluida la semifinal en la que el equipo de Guardiola aplastó al Real Madrid.

No obstante, es posible que, este sábado, usted lo encuentre algo familiar, y no sería una casualidad: Marciniak pitó la última final del mundo, en la que también estuvieron presentes Lautaro Martínez y Julián Álvarez, delanteros del Inter y el City, respectivamente. Aquella debe haber sido una de las jornadas más complicadas en la carrera del juez, ya que en Doha tuvo que cobrar tres penales –uno para Argentina y dos a favor de los franceses– y validar el 3-2 parcial que Messi marcó sobre la línea del arco en el 108′.

Szymon Marciniak, con Lionel Messi y Olivier Giroud en la final del mundial 2022. - AFP
Szymon Marciniak, con Lionel Messi y Olivier Giroud en la final del mundial 2022. - AFP

Pasado el partido, fue ampliamente criticado por la prensa francesa, la cual se centró en el tercer gol argentino y en la invasión de cancha de la banca de suplentes albiceleste (que no pudo contener la euforia), cuando su número 10 aún estaba por empujar la pelota. El experimentado árbitro recibió el apoyo del jefe del Comité de Arbitraje de FIFA e ícono futbolístico, Pierluigi Collina, y, de su defensa, se desprendió la siguiente idea: La aplicación literal y dura del reglamento, apoyada en la tecnología, no puede estar por encima del criterio humano; de lo contrario, el VAR y otras herramientas tecnológicas se volverían enemigas de la justicia.

Este sábado, a las 2 de la tarde, los protagonistas mencionados se unirán a más de 70,000 fanáticos, en el espectáculo deportivo más importante del año, que en 2022 congregó a alrededor de 700 millones de espectadores en todo el mundo. Es la primera gran final desde el Francia – Argentina del año pasado. Si bien los de Guardiola llegan como favoritos, lo hermoso de la Champions League es que cualquier cosa puede pasar, especialmente en la definición del torneo.