El Mundial Brasil 2014 tendrá tiempos muertos para que los jugadores tomen agua si la temperatura supera los 32 grados centígrados, decidió hoy el Comité Ejecutivo de la FIFA.
Las paralizaciones para que los futbolistas se rehidraten se realizarán después de superar el minuto 30 de cada una de las mitades del partido, señala un comunicado enviado por el máximo organismo del fútbol internacional.
Esa temperatura será habitual en varias sedes del Mundial de Brasil 2014, entre ellas Natal, Fortaleza, Recife y Manaus, y también existe probabilidad en Salvador y hasta en Río de Janeiro.
La iniciativa de hacer tiempos muertos por el calor fue sugerida por el seleccionador italiano, Cesare Prandelli.
No obstante, la FIFA decidió el último martes mantener los horarios de los partidos, a pesar de que varios de ellos se disputarán a las 13:00 horas, tiempo en el que se registra el máximo calor.
El organismo también determinó hoy que sea obligatorio que haya un desfibrilador en todos los estadios donde se jueguen choques internacionales.