Aquel que no corra y presione no jugará en Alianza Lima. Ese es el sello que trata de imponer Guillermo Sanguinetti en esta pretemporada. Ayer los blanquiazules afrontaron su tercer partido amistoso ante el Ingolstadt de Alemania y aunque cayeron 3-2 (donde Koichi Aparicio y Víctor Cedrón anotaron para los íntimos), lo más destacable fue el desempeño del volante uruguayo Pablo Míguez, pues no solo recuperó balones, sino también ayudó en la creación.
Los victorianos se medirá este viernes ante el Fortuna Dusseldorf.