Estaba nervioso: todo era milimétrico e imponente. Y sobre la alfombra roja el Perú y Carlos Carlín, el único actor peruano de Paddington en el Perú, la tercera entrega del entrañable oso de origen peruano y que es un ícono en el imaginario británico. Cinta que el viernes último se estrenó en el Reino Unido y que llegará a nuestro país el 2 de enero de 2025.
En el filme, Paddington viaja al Perú junto con la familia Brown para conocer sus raíces, y vive una serie de aventuras por nuestra Amazonía y los Andes.
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Carlos siguió avanzando y los nervios se quedaron atrás. Había varios peruanos que lo saludaban y, sobre todo, ingleses que lo llamaban por su nombre o le gritaban “Perú, Perú”. Le extendían los brazos, querían tocarlo. Una bandera roja y blanca se cruzó en su camino y la ondeó. “Se siente bonito”, recuerda.
El Perú en lo alto del entretenimiento cinematográfico mundial, pero no es la primera vez. Pasó con Tintín y el Templo del Sol (1946), donde el reportero Tintín viaja al Perú para encontrar al profesor Tornasol, quien ha sido secuestrado por unos incas. O también tenemos El secreto de los incas (1954) con Charlton Heston e Yma Sumac, una aventura en el Cusco.
O más recientemente con Dora y la ciudad perdida (2019), un viaje a la selva peruana; o Transformers: el despertar de las bestias (2023), que llegó a Machu Picchu.
¿Por qué nuestro país provoca esta fascinación? El antropólogo Alex Huerta-Mercado ensaya respuestas. El Perú, en comparación con el resto del mundo, fue descubierto tardíamente y todavía alberga esa idea de poscolonialidad. Un país que tiene selva y sierra, que parecen como una otredad total. Percibido como lejano, exótico y como guardián de toda una tradición.
“Claro, hay un total desconocimiento y hay una idealización tremenda. Existe un Perú congelado en el tiempo, un Perú exótico que tal vez nunca existió: el Perú de las postales, el Perú de personajes hieráticos”, explica.
Para el autor del libro Derramaba lisura, nuestro país se ha vuelto un depositario de todo un romanticismo; quizás la esperanza de un mundo que añora una tradición que siente que ya no tiene.
Carlos Carlín: "Estamos en los ojos del mundo: es un excelente momento"
Ha sido increíble la experiencia del avant premiere en Londres. Conocer a Olivia Colman es un sueño; a Hugh Grant, otro actor que admiro; Antonio Banderas. Y Perú llama mucho la atención por su historia, su tradición, su cultura. Y esta es una llamada de atención —si es que logran escuchar algo los señores del Congreso— porque se puede ayudar mucho con producciones como esta para que se vengan a filmar aquí, como ocurre en República Dominicana, Costa Rica, en otros países donde se han exonerado de impuestos a estas producciones. Imagínate la cantidad de películas que se pueden venir a grabar aquí teniendo costa, sierra y selva, y escenarios increíbles. Es algo que todavía nuestros amigos de la política no lo entienden. Estamos en los ojos del mundo y es un excelente momento para que el Perú se abra cinematográficamente.
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