Selena Quintanilla: cuando los fans estuvieron a punto de causarle un accidente

A pesar de todo, su música e imponente estilo dejó un gran legado y hasta la fecha continúa cosechando éxitos. Precisamente, en el 2020 se estrenó su serie biográfica a través de Netflix, la cual reveló algunos detalles nunca antes contados por la “Reina del Tex- Mex”, causando sensación entre sus fanáticos.

Además de la producción de la plataforma de streaming, en 1997 se estrenó una película de su vida, protagonizada por Jennifer López, la cual mostró una impactante escena que habría vivido la artista en un concierto que brindó en Monterrey, donde estuvo cerca a desplomarse frente a las miles de personas que la miraban en el escenario.

En la ficción, Quintanilla se desploma debido a la euforia de sus fanáticos, quienes cantan a todo pulmón cada uno de sus temas. Pero, ¿esto fue real o solo fue algo creado por los guionistas? Fue real a medias. “Selena y Los Dinos” efectivamente estuvieron a punto de suspender un concierto en Monterrey, debido a que había mucha gente que intentó abalanzarse al escenario, poniendo en peligro la vida de la agrupación.

En los videos compartidos en redes sociales se puede observar a Selena usando un traje en color negro, en el instante que el escenario estuvo a punto de desmoronarse. En medio de la interpretación de “Baila esta cumbia”, la hija menor de Abraham Quintanilla pidió a los fans que no empujaran, cuando la música se detuvo y el equipo de seguridad empezó a llegar a la tarima.

En todo momento la cantante trató de mantener calmado al público y después fueron los organizadores quienes advirtieron que de seguir el alboroto se cancelaría el concierto, por lo que la situación regresó a la normalidad y Selena pudo seguir cantando y endulzando la noche.

En la ficción, la cantante brindaba un concierto por la tarde, vestida de color blanco. Fue mientras entonaba el tema “La Carcacha” que los asistentes a la presentación empiezan a lanzarse al escenario, causando que se levantara el piso de este. La compositora estadounidense no quería dejar tirado a su público, por lo que regresa a la tarima a interpretar una balada.