El sitio arqueológico Ciudad Sagrada de Caral, se ubica en el valle de Supe, provincia de Barranca, región Lima. (Foto: Proyecto Caral)
El sitio arqueológico Ciudad Sagrada de Caral, se ubica en el valle de Supe, provincia de Barranca, región Lima. (Foto: Proyecto Caral)

Ese 28 de junio de 2009 quedará grabado en la historia del Perú. En la 33ª Sesión del Comité de Patrimonio Mundial, realizada en Sevilla, España, se reconoció a la como patrimonio mundial. Desde entonces, han pasado 14 años y la Ciudad Sagrada, ubicada en el valle de Supe, sigue dando de qué hablar.

La antropóloga, arqueóloga y educadora peruana, Ruth Shady, descubrió y puso en valor a una de las civilizaciones más antiguas del planeta. “Sentimos una gran satisfacción el haber aportado al conocimiento de la historia andina y mundial, en uno de los logros sociales más relevantes: la formación de la civilización. También es una gran responsabilidad, porque esa primera civilización andina, Caral, debe continuar siendo investigada, conservados sus valores y testimonios, y su historia social difundida para generar reflexiones en el presente y acciones para propiciar un mejor futuro”, explica a Perú21.

Ciudad sagrada

¿Por qué es una ciudad sagrada?, preguntamos. “La denominación de Ciudad Sagrada está relacionado con la importancia que tuvo en la ideología de sus habitantes, a todos los componentes arquitectónicos, tanto en los edificios públicos principales, cuanto en las viviendas más pequeñas, los antiguos caralinos dedicaron un lugar para instalar fogones donde pudieron llevar a cabo quemas e incineraciones de ofrendas”, señala.

“En los edificios públicos el fogón lo ubicaron en el centro de grandes salones ceremoniales, o en altares construidos expresamente para albergar un fogón, e implementaron todo un sistema de ventilación subterránea para captar la energía del aire y optimizar la combustión. El examen del sistema de ventilación revela un avanzado conocimiento en mecánica de fluidos, con aplicación del efecto Venturi, y el alcance de altas temperaturas con menor consumo de combustible”, añade.

“La quema de ofrendas, en actos públicos o privados orientados a la sacralidad, caracterizaba la vida cotidiana de la ciudad, por ello el nombre de Ciudad Sagrada”.

Amenazas

Un equipo multidisciplinario, conducido por arqueólogos peruanos, efectúa actividades de investigación, conservación y vinculación comunitaria, en la Ciudad Sagrada y en otros once asentamientos arqueológicos monumentales en el valle de Supe y uno en Huaura.

Como todo vestigio del pasado Caral está cercada por amenazas. “Para asegurar la preservación de la denominada “Zona Arqueológica Monumental Caral-Chupacigarro”, hemos venido denunciando la ocupación ilegal, y el daño al patrimonio arqueológico, con riego y sembríos, en terrenos de propiedad del Estado Peruano, que están debidamente inscritos en los Registros Públicos. Esperamos que las autoridades nos ayuden a resolver este problema, y prevalezca el bien común sobre los intereses individuales”, puntualiza.

También ha solicitado vigilancia policial permanente para velar por la seguridad del público que ingresa al valle para conocer la Ciudad Sagrada y la de los colaboradores que laboran allí.

Ciudad De Caral