[OPINIÓN] Aldo Mariátegui: “¿Nace el Bukele peruano?”.
[OPINIÓN] Aldo Mariátegui: “¿Nace el Bukele peruano?”.

¿El cómico Carlos Álvarez ha lanzado un globo sonda sobre la posibilidad de ser candidato presidencial con esta entrevista dada ayer a esta casa editora? Por supuesto que allí niega toda intención política, pero nadie en su sano juicio va a confirmar una candidatura tan prematuramente. Por lo pronto, Álvarez ha sabido situar muy bien su caballito de batalla con la preocupación actual más acuciante para los peruanos: la seguridad pública. Y lo hace con un lenguaje bukelesko (el domingo que viene hay elecciones generales en El Salvador y Bukele va a arrasar), que es lo que el electorado quiere oír. Incluso, al parecer, una encuesta reciente de IPSOS posiciona bien electoralmente a este comediante. Hace muchos años, un coleguita quiso cooptar al entonces candidato Ollanta Humala con un grupo de liberales (pregúntenle, si no, al columnista Raúl Mendoza). Pues parece que ahora la está chuntando más con su apadrinado Álvarez. ¿Tendremos un bukelizado Zelenski peruano? El tiempo lo dirá.

-Pensé escribir una columna sobre el demagógico, politiquero y fuera de sitio reciente comunicado de la rojimia Conferencia Episcopal, pero me percaté de que no valía la pena porque pasó tan inadvertida (salvo para Mohme) que era gastar pólvora en gallinazos. Es impresionante cómo la Iglesia peruana ha perdido fuerza y presencia (pregunten en las calles capitalinas el apellido del obispo de Lima y el 99% no lo sabe. ¡Eso no pasaba con Landázuri, Vargas Alzamora o Cipriani!). Ya nadie les hace caso, salvo algunos gobernantes que acuden -ilusamente- a ellos a veces como mediadores en crisis.

-Algunos de nuestros fiscales de verdad que parecen nazis por lo crueles que son... ¡Pedir detención domiciliaria para el octogenario y recién liberado Fujimori a estas alturas es de un sadismo barato, enfermo y abusivo!

PD.: Insisto: una de las mejores estrategias para evitar que el narcotráfico nos arrolle violentamente como Ecuador es permitir la instalación de una base militar gringa.