[Opinión] Aldo Mariátegui: Triunfó el delincuente antiperuano en Brasil
[Opinión] Aldo Mariátegui: Triunfó el delincuente antiperuano en Brasil

Ganó Lula, el delincuente que armó, junto a las constructoras brasileñas, esa gigantesca maquinaria de corrupción que arrasó con Brasil y con casi toda Latinoamérica. Tal como la chusma necia gritó “¡Libera a Barrabás!” para que Pilatos tenga que soltar a un antisocial, casi un 51% de brasileños ha optado adrede por ese criminal, con pleno conocimiento de que votaron por un mafioso. Ciertamente, Bolsonaro no es el Jesús bíblico y tiene cosas terribles, pero como peruano no podía querer que gane un tipo que tanto daño nos hizo, pues ese delincuente de Lula metió completamente sus narices inmundas en nuestro país (yo mismo fui una víctima de estos mafiosos lulistas y perdí un trabajo que me gustaba mucho por ellos).

No olvidemos el impacto tan perverso de Lula en el Perú. En lo político, estuvo detrás de los corruptos e ineptos Ollanta Humala y Susana Villarán, enviando incluso a asesores (como Luis Favre, el gran amigo de Mirko Lauer) y mucho dinero para estos. En lo económico, nos significó irrecuperables despilfarros gigantescos en miles de millones de dólares con esas carreteras interoceánicas, que tan solo han servido para la expansión de las mafias de mineros y madereros ilegales. En lo moral, corrompió aquí hasta el tuétano a políticos, técnicos y periodistas (muchos conchudos que por allí siguen pontificando) a través de sus socios de Odebrecht y el resto. En suma, Lula pudrió a todo a lo que se le acercó en el Perú. Lo único que me alegra es que Lula la va a tener sumamente difícil con el Congreso y la mayoría de las gobernaciones en manos de la oposición y con la mitad de Brasil decididamente en contra de él. Ojalá le hagan la vida a cuadritos desde el primer día.

No faltarán los peruanos malnacidos que hoy saldrán celebrando públicamente su victoria, pero ya sabemos que la mayoría de ellos –aparte de los eternos socialconfusos y “tontos útiles”– serán zurdos y no por nada una palabra que define precisamente al detrito humano rima con la palabra “izquierda”.