Casos a punto
Casos a punto

Como propósito central de este año que comienza, el equipo especial Lava Jato debe fijarse plazos perentorios para convertir las investigaciones y acusaciones que llevan en procesos que conduzcan a resultados en firme.

No solo para desmentir afirmaciones falaces que se han venido difundiendo en los últimos días sobre una supuesta morosidad en las investigaciones, de que no estarían “llegando a nada”, sino porque hay casos notorios que a estas alturas cuentan con una importante acumulación de evidencias y la respectiva documentación que las sustenta, como ocurre con los de Ollanta Humala-Nadine Heredia, Keiko Fujimori y Alejandro Toledo.

Sabemos que no será nada fácil el camino, como no lo ha sido hasta ahora, plagado de ataques y obstáculos de todo tipo, dentro y fuera del Ministerio Público, pero a la vez se hace prioritario evitar cualquier dilación que termine favoreciendo a los involucrados y lograr que las pesquisas comiencen a redondearse, es decir, que se conviertan en condenas que finalmente castiguen a quienes incurrieron en actos de corrupción.

En los casos mencionados existen suficientes elementos de convicción como para pensar que el objetivo no es nada lejano. En lo que respecta a Humala-Heredia, por ejemplo, cuyo expediente se encuentra en la fase de acusación y ad portas del juicio, por lavado de activos durante las campañas presidenciales de 2006 y 2011, con pedidos de 20 y 26 años de cárcel, debería resolverse antes de que acabe el año.

La acusación formal a Keiko Fujimori, también por lavado de activos durante las mismas campañas electorales, según ha anunciado Rafael Vela, se presentará a más tardar a fines de este mes o principios de febrero. Aunque el discutido fallo del TC representó un percance, la investigación no se detuvo y ahora se cuenta con nuevos elementos que consolidan las hipótesis de la Fiscalía.

A la pareja de la chakana se le imputa delitos de lavado de activos, tráfico de influencias y colusión por el caso Ecoteva, e igualmente se encuentra en la fase de acusación, proceso al que se le sumarán las investigaciones de los sobornos por la carretera Interoceánica. En el caso de ambos, lo que debe acelerarse, y esto ya en el terreno de la Cancillería y la Presidencia del Consejo de Ministros, es el trámite de extradición.

En estos casos conspicuos, contra lo que dicen quienes acostumbran a distorsionar la información, se ha avanzado, y no poco. Pero el 2020, como ha dicho el fiscal Vela, tiene que ser el año de las definiciones.

TAGS RELACIONADOS