"Los adultos debemos acercarnos, conocer mejor e involucrarnos también en un mejor uso de la tecnología digital, ya que el aprendizaje también se da por observación". (Foto: iStock)
"Los adultos debemos acercarnos, conocer mejor e involucrarnos también en un mejor uso de la tecnología digital, ya que el aprendizaje también se da por observación". (Foto: iStock)

¿Los niños, las niñas y adolescentes deben usar o tener celular? Ante esta pregunta nos surge siempre este dilema: si lo restringimos pensamos que podríamos dejarlos en desventaja frente a los de su generación, pues un celular te conecta con aprendizajes y mundos donde cada vez más vas a necesitar ser una persona con habilidades digitales. Sin embargo, también nos preocupamos porque vemos que el uso del puede aislar, crear adicción y hacer que pierdan contacto con otras personas en el mundo real trayendo dificultades de socialización.

Entonces, ¿qué hacemos?, Richard Culatta, experto en tecnología educativa, encontró en sus investigaciones que las familias y los docentes no brindamos las condiciones suficientes para que nuestros hijos o estudiantes usen la tecnología para que impacte de manera positiva. Afirma que nos focalizamos mucho más en lo que no se debe hacer, cuando lo más importante es educarlos, modelar comportamientos de buen uso y así prepararlos para un mundo que cada vez más se vuelve digital.

Comenta, por ejemplo, que así como los maestros recomiendan a sus estudiantes buenos libros, también pueden recomendar buenas aplicaciones para que puedan buscar información nueva y seguir incentivando su curiosidad por aprender. Existen aplicaciones donde se identifican el tipo de plantas o insectos que tienen en la casa o en el parque, otras donde se puede observar el cielo e identifican el nombre de los planetas o estrellas.

Y como padres o madres también podemos crear hábitos saludables que los ayuden a convivir mejor con la tecnología, como apagar el timbre de las alertas o tener en la casa un lugar para cargar los celulares por la noche y no dormir con los celulares en el cuarto.

Esto implica que nosotros los adultos debemos acercarnos, conocer mejor e involucrarnos también en un mejor uso de la tecnología digital, ya que el aprendizaje también se da por observación y somos los adultos quienes modelamos buenos comportamientos. La tecnología puede ayudarnos de infinitas formas siempre y cuando la sepamos aprovechar.

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