Recuerdo de una tradición olvidada: Las Fotografías Post Mortem de la Lima del siglo XIX por Enrique Mori

Desde la creación del daguerrotipo hace un par de siglos, la fotografía ha tenido varios roles a través de la historia, creando tradiciones que hoy en día han expirado, incluso que hoy en día serían un poco ‘extravagantes’. Un aspecto de ello son las famosas fotografías post mortem, muy de moda en Lima en el siglo XIX, una tradición que se ha perdido pero que no se ha olvidado.

Y no se ha olvidado precisamente gracias a trabajos como el de Enrique Mori, bibliotecólogo y curador del archivo fotográfico que ha venido realizando conservatorios desde el 2005 relacionados a la fotografía post mortem y otros aspectos culturales de la Lima de hace dos siglos, en un intento por rescatar estas costumbres de antaño.

En ese sentido, hablamos con el propio expositor de ‘Fotografías Post Mortem Lima Siglo XIX’, conversatorio que se realizó con el colectivo de artistas denominado ‘Los Cuervos de Lilith’.

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¿Cómo inicia su investigación y cuál es su objetivo?

En 1994 yo estaba encargado del archivo fotográfico de la Biblioteca Nacional y ahí revisando los archivos y consultando fuentes como la Tesis de Keith McElroy, que habla de la fotografía post mortem en el siglo XIX en Perú, comencé a investigar y encontré fotografías de este tema, ahí nace el interés para poder seguir buscando más información y fotografías, acumulando además otros temas y elementos.

El interés es rescatar estas antiguas costumbres de la Lima del siglo XIX, como es también las fotografías, por ejemplo, de Las Novias de Negro, que era una costumbre que nació tras la Guerra con Chile y sus consecuencias. También sobre la investigación de Las Amas de Leche, mujeres que cuidaban a los niños de las familias de clase media en adelante, generalmente afroperuanas, contratadas como nodrizas. La idea es rescatar estas costumbres que están casi en el olvido.

¿Cuál es la historia detrás de las fotografías post mortem?

Cuando se habla de la exposición post mortem se habla también de un tema que se llama Memento Mori, una palabra que significa “recuerda que vas a morir”, y se incluye también al proceso de luto, los actos de cementerio, muchos temas relacionados a la muerte, además de las fotografías.

En algunos casos de fotos que hemos encontrados, tomados de la investigación de Keith McElroy, quien fue el pionero en la investigación en torno a la fotografía en el Perú del siglo antepasado, hay algunas historias, pero la mayoría de las que recopilamos son meramente informativas, no tenemos mayores datos sobre los fotografiados. Pero una que es conocida por su historia es la del expresidente San Román, que murió en abril de 1863.

¿Era más común en niños?

Los niños eran el punto principal de estos retratos, porque eran los seres más queridos del hogar, esperados con gran expectación, y tras la lamentable muerte de los infantes por alguna enfermedad, ellos quería guardar ese último retrato del niño, para la familia.

En algunos casos suponemos algunas teorías. Por ejemplo, en algunos niños se les puede ver un rostro demacrado, como si hubiesen tenido un problema estomacal que pudo haber sido por algunas enfermedades de la Lima de entonces, como la disentería, el cólera u otras enfermedades similares. Recordemos que la salud en esa época era terrible, las acequias corrían por la calle y se secaban en verano, produciendo varias enfermedades, eso nos explica Atanasio Fuentes en algunas de sus obras del siglo XIX.

¿Cómo va perdiéndose esta costumbre?

La fotografía post mortem nace como una costumbre privada, para que la familia en privado mantengan los recuerdos de sus fallecidos, esto en la época del daguerrotipo, a inicios de 1840. Sin embargo, cuando fallece el expresidente San Román, ya se empieza a distribuir y comercializar una especie de formato tarjeta, de 6x9, este tipo de fotografías, que causó furor en el tema de coleccionismo, porque ya no solo se coleccionaban fotografías de familiares o amigos, sino de eventos, como el caso del expresidente u otros personajes públicos.

Esto origina a los álbumes fotográficos y ya el acto privado se convierte en público, por estos hechos, y cuando surgen las revistas ilustradas en el inicio del siglo XX, ya este tipo de actos fúnebres pasan de ser privados a ser públicos, una imagen se vuelve parte de la noticia y el arte de la fotografía post mortem desaparece, porque se convierte en algo informativo, para la noticia. Así se pierde la costumbre de la fotografía post mortem, hoy en día es poco común sacarle una fotografía a alguien en su féretro, pero antes era una práctica normal.

Era un tradición perdida, pero no olvidada

Es importante seguir investigando e indagando dentro de nuestros archivos y de lo que es la prensa de aquellos años para encontrar información relacionada a estos temas, por ejemplo, todo lo que se refiere a obituarios de este siglo XIX es interesante leer, como la poesía que se publicaba en algunos diarios para la muerte de familiares, es una gran muestra de cultura a nivel literario.

Al perder a algún ser querido era común publicar alguna prosa o verso dentro de algunos diarios de la época, es interesante incluso la publicidad, los primeros fotógrafos que realizan publicaciones con respecto al tomar con el daguerrotipo de algunas personas ya fallecidas. Indagar en los archivos nos permite reconstruir la vida social de la Lima del siglo XIX.

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