Clifford Watson: “El caballo peruano de paso nos debe enorgullecer a todos”

Las primeras imágenes de infancia fueron el campo, el establo, los caballos, las vacas. Dominguín fue uno de sus primeros caballos, lo acompañó 28 años. Con Tunante ganó su primer concurso nacional. Y hoy tiene a Valentín, alojado en el establo de Lurín, junto a otros 11 equinos.

El establo también es la casa de Clifford Watson. Descansa a las 8:30 de la noche y arranca el día a las 4:30 de la mañana. El establo también es la oficina de trabajo, las 24 horas. Y en el establo tiene una cancha de rugby, su deporte de cabecera.

Es ingeniero empresarial. Jugó rugby y hoy es vicepresidente de la Federación Peruana de Rugby. Es ganadero y presidente del comité organizador de la II Feria del Caballo Peruano de Paso, que se realizó el fin de semana en Mamacona, organizado por la Asociación Nacional de Criadores y Propietarios de Caballos Peruanos de Paso. De nacimiento es amante de los caballos.

Es domingo, el reloj marca las 4 de la tarde en Mamacona, la casa del caballo peruano de paso. Clifford fue parte del desfile de banderas a caballo, antes del esperado concurso nacional de coreografías de amazonas. Mientras caminamos para buscar una mesa donde conversar, coordina por teléfono, responde consultas al paso, escribe por el celular. Nos sentamos y se acercan dos personas para más coordinaciones. En la mesa hay dos tazas de café, intenta tomar un sorbo, pero le hago la primera pregunta.

MIRA: Luis Alayza: “Caminos del Inca es la única carrera de autos en el mundo que recorre más pueblos”

-Este será uno de los pocos momentos en que te sientas en el día.

(Risas). Hay que estar en todos los detalles, pero es una linda sensación. Hemos arrancado el viernes con una exposición, ayer (sábado) con marinera y los juegos y hoy estamos en la recta final con las coreografías. Es mi primera vez como presidente de la feria, para lo cual te proponen. Formo parte de un curso de aspirantes a jueces y estoy desde hace tres años trabajando todos los fines de semana de la mano con los jurados de los caballos de paso. Estoy activamente viajando a provincias a juzgar concursos.

-¿Qué pasos hay que cumplir para ser juez?

Hemos tenido tres años de preparación, hay un filtro mediante exámenes escritos y en concursos evaluando a los caballos. Y ahorita tengo que ser evaluado en cinco concursos importantes en el Perú por jueces que son de clasificación A. Llevo uno y me faltan cuatro. El siguiente es ahorita en Huaral, el 2 de diciembre. Dentro de los jueces hay categoría A, B y C.

-¿En cuántos años se llega a la categoría A?

Más o menos son 10 años. Es una carrera. Es una dedicación, son años de años. Este es mi hobby, acá nadie gana plata. Es mi afición. Mi papá también es aficionado y me ha inculcado esto desde niño.

-También le dedicas tu tiempo al rugby. ¿Es un deporte de nicho?

No, pero sí más desconocido que los caballos. Hablamos de un ambiente donde hay mil jugadores entre hombres y mujeres. Tenemos competencias internacionales todos los años. Está creciendo bastante, hay 12 clubes en Lima y 24 en el Perú.

-¿Hay alguna coincidencia entre ser jugador de rugby y montar caballos?

Quizás los valores sean una similitud. Uno habla de la integridad en el rugby y en los caballos de la caballerosidad. Es importante el lado social en el rugby y en los caballos.

-¿Por qué lo social en rugby?

En el rugby tienes dos tiempos y hay el tercer tiempo, que es el espacio donde comparten los dos equipos que han estado de rivales en la cancha.

-¿Como una tertulia?

Así es, te tomas tu chelita, comes. Solo jugadores y cuerpos técnicos. Y pasa en todas las ligas, en todos los partidos.

-¿En el rugby prima la fuerza y en el caballo hay un dominio más fino?

El caballo tiene que estar bien preparado y entrenado. En el rugby hay mucha estrategia y más táctica que en el fútbol.

-Para dedicarte a ambas cosas debes tener una visión amplia, ¿no?

Mucha disciplina… También trabajo en un establo ganadero, en producción de leche que vendemos a una empresa importante, acá en Lurín. Y en el establo no paras, es de lunes a domingo, las 24 horas; las vacas ordeñan tres veces al día.

-Tu oficina es el establo.

Así es y vivo en el establo. Es una hacienda de la familia. Y tengo una cancha de rugby, que la hicimos para desarrollar el club Unión. Ahí tenemos chicos desde los 6 años hasta veteranos de más de 50 años.

-¿Falta difundir más lo que se hace con el caballo peruano de paso?

Sí. El caballo peruano de paso une a las personas. Hay concursos todos los fines de semana en distintas partes del Perú. Y hay sitios donde las familias pueden ir a montar caballos y aprender. Debe ser algo que nos enorgullezca a todos los peruanos. La gran mayoría ha escuchado alguna vez sobre el caballo peruano de paso, ¿pero cuántos han montado uno?

-A veces se cree que este caballo no es accesible para todos.

No es cierto. El caballo peruano de paso nació como un caballo de trabajo, se usaba en las haciendas para transportar cosas, para trabajar la chacra, mover animales, y sigue así. En Lima se ve que es una crianza de élite por el costo de la alimentación; recordemos que vivimos en un desierto donde no crece forraje, uno tiene que invertir día a día para alimentar al caballo.

-Al final del día llegarás al establo y descansarás. ¿Pero hay espacio para la reflexión?

Mañana a las 6 de la mañana tengo que tomar un avión, me voy a Ecuador, a ver caballos (risas).

AUTOFICHA:

-“Soy Clifford Erick Watson Fernández. Clifford es el nombre de un amigo de mis papás. Mi mamá siempre me dice: quiero llamarte y que seas el único que voltee. El Clifford amigo fue piloto de avión. Mi bisabuelo fue inglés, llegó al Perú para la construcción del ferrocarril en Arica”.

-“Estudié Ingeniería Empresarial en la Universidad del Pacífico. Tengo una maestría en Administración, también en la Pacífico. Nací en Lima, tengo 35 años. Le he dedicado 15 años de mi vida al rugby: en el colegio, en la universidad, como club y ahora como directivo”.

-“Soy vicepresidente de la Federación Peruana de Rugby. Esta semana tenemos el partido Perú-Costa Rica en la Universidad Católica. También he sido seleccionado en el año 2008. Y para 2024, vamos a tener los juegos escolares nacionales de rugby. Y en los caballos llevo más de 25 años”.

VIDEO RECOMENDADO: