“El Chavo del 8” ha celebrado los 50 años de su primera emisión en la televisión mexicana, el primer paso para convertirse en uno de los espacios televisivos más recordados y exitosos de la región. El programa humorístico debutó un 21 de junio de 1971 en la Televisión Independiente de México, lo que se llamaría después Televisa. El programa de Roberto Gómez Bolaños, aunque ha mantenido la esencia de su historia, en ese entonces presentó una dinámica diferente entre los personajes. Así fue el episodio debut.
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La serie cómica logró tener ocho temporadas y 290 episodios, que lo mantuvieron en el aire hasta la década de los 80. Luego, Gómez Bolaños volvería con “Chespirito” en los 90.
Sin embargo, “El Chavo del 8” nunca se fue de las pantallas, porque seguía formando parte de las parrillas televisivas no solo de México sino de toda la región.
Los episodios aparecían una y otra vez en diferentes horarios, demostrando que todavía podía entretener a las generaciones venideras, hasta que fue sacada del aire hace poco.
¿QUÉ PERSONAJES APARECIERON EN EL PRIMER EPISODIO?
El primer capítulo de “El Chavo del 8” se llamó “El Ropavejero” y tuvo en su elenco a Roberto Gómez Bolaños como el Chavo; María Antonieta de las Nieves, quien era la Chilindrina y Ramón Valdés como Don Ramón.
Además, el Ropavejero fue interpretado por el actor José Luis Fernández, quien no volvió a aparecer en el programa humorístico.
El episodio se centró en la Chilindrina y su miedo al Ropavejero, porque Don Ramón la asusta diciéndole que este se lo llevará si no toma su jarabe.
¿QUÉ CAMBIO EN “EL CHAVO DEL 8” DESDE SU PRIMER CAPÍTULO”?
En ese momento, Don Ramón y la Chilindrina vivían en la casa que después fue ocupada por Doña Florinda y Quico, quienes no aparecen en el episodio.
Mientras que Don Ramón usaba una boina en lugar de su gorra azul de pescador. Su polo era un amarillo muy llamativo.
En tanto, el Chavo también llevaba otros colores de su popular vestimenta, al igual que la Chilindrina, y todavía no lloraba con su clásico “pi, pi, pi, pi”, sino que decía “Ahhhh”.