Graves deficiencias en el transporte fluvial que ponen en riesgo la vida y la integridad de las personas detectó la Defensoría del Pueblo tras una inspección en diversos puertos de Ucayali, Pucallpa y Loreto.
En la supervisión se encontró irregularidades en la infraestructura de las naves y en el embarque y desembarque de pasajeros, así como la falta de respeto a los horarios. También se detectó que las empresas permiten que los menores de edad viajen solos.