CAOS. Hubo desorden entre el jirón Puno y la Av. Nicolás de Piérola. (Rafael Cornejo)
CAOS. Hubo desorden entre el jirón Puno y la Av. Nicolás de Piérola. (Rafael Cornejo)

Redacción PERÚ21

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El reordenamiento de la Av. Abancay empezó con la desorientación de personas –que no sabían en dónde abordar las unidades– y con el desorden generado por los taxis.

Desde temprano, los inspectores de la Municipalidad de Lima se encargaron de que los buses y las cústers respetaran los paraderos A, B y C.

Sin embargo, varios pasajeros desconocían dónde debían abordar los micros. "He tenido que caminar cuatro cuadras porque el bus que me lleva no para. Nadie informa bien", expresó Esther Córdova.

El congestionamiento vehicular se registró con más intensidad entre el jirón Puno y la avenida Nicolás de Piérola.

En las horas punta, el caos fue total porque es justo en ese tramo donde todas las unidades pueden estacionarse para recoger personas.

MULTAS TAXISOtro problema se originó cuando los taxis y los colectivos insistían en dejar pasajeros en los carriles izquierdos. Según la norma, ningún auto puede estacionarse para hacer subir o bajar a personas en la arteria. Esto solo se puede realizar en calles alternas.

Al respecto, la Gerencia de Transporte Urbano (GTU) informó que ayer se impuso 22 multas de S/.218 y S/.720 a unidades que no respetaban esta restricción o que no tenían autorización para circular.

Cabe indicar, además, que del 15 al 19 de diciembre se impuso 580 papeletas vehiculares en la mencionada vía.

SABÍA QUE

- En los paraderos A se pueden estacionar 1,312 microbuses y cústers.

- Los micros se pueden estacionar en el paradero C.