En el Perú los tipos más frecuentes de hepatitis son la A, B y C. Si bien todas tienen síntomas similares, la diferencia varía en el contagio, evolución, pronóstico, severidad y tratamiento médico que se le pueda brindar.
En el país, la Hepatitis B es la causante del 90% de los casos de cáncer del hígado, es por ello que, en la actualidad, el Ministerio de Salud (MINSA) y las aseguradoras promueven la importancia de la vacunación y su prevención.
“La hepatitis es la inflamación del hígado, órgano vital que participa de la digestión, tiene funciones metabólicas y ayuda a eliminar toxinas. Cuando el hígado se encuentra inflamado o dañado, su función puede verse afectada”, explica el Dr. Luis Del Águila, Sub Gerente de Bienestar de Pacífico Salud EPS.
La causa más frecuente de hepatitis es la infección viral. En el Perú, los tipos más frecuentes de hepatitis viral son: hepatitis A, hepatitis B y hepatitis C. Si bien todos los tipos de hepatitis viral pueden causar síntomas similares, se diferencian en su forma de contagio, evolución, pronóstico, severidad y tratamiento.
La hepatitis A es una enfermedad benigna en la mayoría de los casos, sin embargo, tanto la Hepatitis B como C tienen mayor riesgo de desarrollar una enfermedad crónica, provocando a largo plazo cirrosis e incrementando el riesgo de desarrollar cáncer al hígado. “Si presentas, fiebre y escalofríos, orinas oscuras, heces claras, ojos y piel amarilla, dolor abdominal del lado derecho, es importante acudir a un centro de salud inmediatamente”, indica el Dr. Del Águila.
Cualquiera que sea la enfermedad lo primero es no alarmarse, En caso hayas sido diagnosticado con hepatitis A, debes saber que no existe un tratamiento específico para eliminar el virus, y tu cuerpo lo elimina por sí solo, por otro lado, tu médico podría indicar tratamiento sintomático, guardar reposo, dieta e hidratación
Si el caso es de hepatitis B y C el especialista brindará un tratamiento adecuado según el tipo de fase en el que se encuentre, que conlleva a suministrar medicamentos antivirales que batallen con la enfermedad.
“Si bien la hepatitis A puede ser totalmente reversible, no hay que olvidarse que las hepatitis B y C tienen mayor riesgo de derivar en enfermedad crónica, y que sin un seguimiento y tratamiento adecuado pueden ser mortales”, concluye el especialista.