Aunque uno siga una dieta firme, puede romperla en cualquier momento; al comer comida rápida. Pero los nutricionistas en general no critican esa práctica, con tal de que no llegue a ser un acto excesivo. Aunque sí existen ciertas comidas que los expertos recomiendan evitar a toda costa.
Aunque no nos harán daño, sí son alimentos que los gastroenterólogos comen lo menos posible.
MIRA: Dos componentes clave para una buena nutrición: proteína y fibra
Barritas de energía
Aunque a primera vista se vean sanas, no son muy recomendables de ingerir, puesto que dan a la hinchazón y gases. la doctora Harmony Allison, gastroenteróloga del Centro Médico Tufts, explicó sus razones en la página de Huffpost: “Nunca como barritas ‘proteicas’. Suelen estar muy procesadas y contener muchos aditivos de utilidad desconocida. Podemos obtener la misma cantidad de proteínas en un vaso de leche, una ración de mantequilla de maní, nueces o semillas de calabaza.”
Carnes roja
Según la doctora Reezwana Chowdhury, gastroenteróloga del Johns Hopkins, la carne procesada y la roja aumentan las posibilidades de cáncer de colon. “Tienen un alto contenido en grasas saturadas, pero la cantidad de consumo es importante: el riesgo de cáncer de colon es mayor en quienes consumen más de 100 gramos al día”.
Salchichas y otras carnes procesadas
La doctora Rabia De Latour, gastroenteróloga y profesora adjunta de medicina en la Facultad de Medicina Grossman de la Universidad de Nueva York, prefiere alejarse del mundo de los embutidos; ya que tienen un mayor riesgo de cáncer colorrectal. “Los datos han relacionado la ingesta de carnes rojas y procesadas cuatro o más veces por semana con un aumento del riesgo de cáncer de colon de hasta un 20%”.
Pescado o pollo frito
“El aceite de freír puede modular negativamente el microbioma intestinal, lo que agrava la aterosclerosis (acumulación de grasa en las paredes arteriales)”, explicó el doctor Mahmoud Ghannoum, investigador del microbioma y cofundador de BIOHM. “A largo plazo, esta acumulación puede tener consecuencias como infartos y derrames cerebrales”.
Gaseosas
“Estas bebidas también están relacionadas con enfermedades crónicas, como la diabetes y las cardiopatías”, explicó el doctor Simon C. Matthews, gastroenterólogo del Johns Hopkins. “Además, a menudo se asocian con el desencadenamiento de síntomas gastrointestinales de hinchazón, eructos y reflujo, sobre todo cuando se combinan en sus formas carbonatadas y con cafeína”.
Pan blanco
La doctora Shilpa Grover, directora del programa de oncogastroenterología de la división de gastroenterología del Brigham and Women’s Hospital; detalló los cereales refinados empeorarían nuestro intestino. “Los estudios que han evaluado los patrones dietéticos han demostrado que un alto consumo de carne roja y procesada y de cereales refinados se asocia a un mayor riesgo de bolsas inflamatorias en el tracto digestivo llamadas diverticulitis.”