Tony Nicklinson padece del síndrome del cautiverio y su deseo en esta vida es dejar de existir. Tiene 58 años y en el 2005 fue víctima de un infarto cerebral, lo que lo dejó totalmente paralizado y dependiendo de otras personas para poder vivir.
Él calificó su vida como "aburrida, miserable, humillante, indigna e intolerable", según The Guardian, por lo que pidió que un médico lo ayude a morir sin que sea considerado como un asesinato. Sin embargo, la justicia británica negó el jueves su petición, informó la agencia AFP.
Tres jueces del Alto Tribunal estimaron que no correspondía a la justicia alejarse de la posición legal, ya que eso le corresponde al Parlamento, pues la eutanasia y el suicidio asistido son ilegales en el Reino Unido.
Debido a este fallo, cientos de 'tuiteros' compartieron mensajes en apoyo a Nicklinson. Su hija Beth tuiteó que se encontraba "molesta y desconcertada con el resultado".
Pero los familiares de Tony no están solos, ya que lograron reunir, a través de la plataforma Change, 5 mil firmas en apoyo al pedido de eutanasia.
Como se recuerda, Tony es, tal vez, el primer hombre parapléjico que interactúa en la red social Twitter sin necesidad de usar sus extremidades para escribir mensajes. Su primer tuit lo colgó en junio de este año, tal como muestra este video.