Mientras realizaba su servicio en el Hospital de Niños Sor María Ludovica de la Plata, de Buenos Aires (Argentina), una mujer policía escuchó a un bebé llorar insistentemente y tuvo el noble gesto de amamantarlo.
El menor había sido separado de su madre por orden de un juzgado de familia de La Plata y estaba recuperándose de un estado de desnutrición.
La oficial llamada Celeste Jaqueline Ayala, quien hace unos meses se convirtió en madre, aseguró que, al oír los llantos de este bebé, habló primero con los encargados del lugar para que le dieran permiso de lactar.
"Fue una situación súper triste ver cómo lloraba el bebé. Por eso, le digo a la cuidadora: '¿No quiere que lo amamante?'. Al recibir el visto bueno, agarré una silla y le di de lactar. Fue un instinto maternal. Nosotros estamos para ayudar a la sociedad. Me siento contenta por los policía porque a veces nos miran tan mal", dijo Ayala, de 27 años, según reporta el Facebook Somos La Plata.
Este generoso acto dio la vuelta al mundo luego que su compañero de trabajo le tomara una fotografía y lo publicará en las redes sociales.