Lo hunden. En una audiencia realizada en el Cuarto Juzgado Nacional Unipersonal, dos testaferros del empresario Rodolfo Orellana, quien cumple 36 meses de prisión preventiva, confirmaron que este era el cabecilla del clan familiar que ejecutaba la apropiación ilícita de los inmuebles conocidos como La Floral, Plaza Arenas y otros, a través de sus contactos y complicidad con funcionarios y trabajadores de la Superintendencia Nacional de Registros Públicos (Sunarp).
Oscar Omar Pantoja Barrero y Wilmer Arrieta Vega declararon ante los fiscales Elvis Suárez Ferrer y Eiser Jiménez Coronel, del Quinto Despacho de la Fiscalía Supraprovincial Corporativa de Corrupción de Funcionarios, que investiga a los hermanos Rodolfo y Ludith Orellana como presuntos líderes de una organización criminal dedicada al lavado de dinero.
EL NEGOCIO DE LOS INMUEBLES
Según reafirmó Pantoja Barrero, Rodolfo Orellana dirigía el saneamiento ilegal para apoderarse de inmuebles. A cambio le pagaban entre mil y dos mil dólares, aparte de su sueldo como abogado al servicio de los Orellana Rengifo.
También indicó que el ‘Clan Orellana’ lo captó como gerente general de la empresa de fachada ‘Delga Liquidadores y Consultores’, mediante la cual adquirían inmuebles tras ser arrebatados por los contratos ficticios del Área de Saneamiento que manejaba Ludith Orellana Rengifo dentro de su clan familiar.
Además, en la audiencia, el testaferro también manifestó que actuaban mediante otras empresas fachada como ‘Multiempresas S.A.’ y ‘Maderera Santa Fe E.I.R.L’, la cual fue usada para liquidar ilegalmente siete inmuebles de La Floral -en La Victoria- y otros en el Fundo Huachipa.
La maderera fue utilizada para cobrar deudas inexistentes a sus propietarios en complicidad con funcionarios y algunos empleados de la Sunarp.
Mientras tanto, el otro testaferro, Wilmer Arrieta Vega, sostuvo que Rodolfo Orellana lo convenció para firmar contratos y documentos estando prófugo de la justicia, a favor de Vicente Díaz Arce, conocido como el ‘Rey de Gamarra’.
Arrieta Vega detalló también que entre sus acciones ilícitas estaba la obtención de la plaza de toros conocida como ‘Plaza Arenas de La Victoria’, a través de un contrato de arrendamiento con Blanca Paredes, propietaria de la plaza.
Como se recuerda, en octubre del 2018 el juez Richard Concepción Carhuancho dispuso una nueva orden de prisión preventiva por 36 meses para los hermanos Rodolfo Orellana y Ludith, investigados por la fiscalía como presuntos líderes de una organización criminal dedicada al lavado de dinero.
El pedido fue hecho por la fiscal Marita Barreto, quien tiene a su cargo la indagación al llamado 'Clan Orellana'.
Esta orden de prisión preventiva, de acuerdo a la resolución del juez Concepción, vencerá el 2 de octubre del 2021 y se da por la participación de los investigados en un "saneamiento criminal" de dos inmuebles en la Galería Santa Lucía–ubicada en el emporio comercial Gamarra–, en la que también está involucrados el empresario y pastor evangélico Vicente Díaz Arce y su esposa Elizabeth Palomino.