Para Rubén Vargas exministro del Interior el gobierno de Dina Boluarte deberá concentrar todos los esfuerzos en la lucha contra el narcoterrorismo en el VRAEM.
Estoy cansado de ver a los políticos golpearse en el pecho y decir frases consabidas porque eso no va a calmar el dolor de las familias, de padres, hermanos y de los hijos de los policías caídos. El mejor homenaje que podríamos dar es revisar lo que estamos haciendo mal, porque van 50 años donde intentamos enfrentar al terrorismo y al narcotráfico, pero estamos mucho peor. Es tiempo de revisar la estrategia en el Vraem.
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La emboscada narcoterrorista no es una lógica de Sendero Luminoso de los 80 o del Movadef. Lo que tenemos ahora en el Vraem es, en efecto, un grupo terrorista que nace de los remanentes de Sendero Luminoso en el Vraem, pero que ahora ha seguido una lógica distinta tanto en términos ideológicos como políticos. Es un grupo que ha tomado su propia naturaleza como lo que hoy se denomina el Partido Militarizado Comunista del Perú que es muy funcional al negocio ilícito del tráfico de drogas y la coca ilegal. La emboscada tiene que ver por la oportunidad que se le dio a este grupo terrorista de seguir una misma rutina en el Vraem, que facilitó la emboscada a los siete policías. Creo que el tema va por ahí.
El principal problema es el narcotráfico. La presidenta Boluarte ha dicho que ha tomado la decisión política de afrontar este problema, pero, para afrontarlo, el control del orden interno debe de estar bajo la mano de la policía especializada Antidrogas y Crimen Organizado. Cuando hablamos de cocaína hablamos de crimen organizado. Tenemos que invertir la estrategia y atacar directamente al narcotráfico.