Las recientes informaciones que revelarían más pistas sobre el método que usó la empresaria inmobiliaria Sada Goray Chong, para asegurarse proyectos en el sector Vivienda durante el gobierno de Pedro Castillo, han hecho que la Comisión de Fiscalización del Congreso abra una nueva línea de investigación sobre este caso, por lo que citó para esta mañana a Goray, al exjefe del gabinete de asesores del Ministerio de Vivienda, Salatiel Marrufo, y al periodista Mauricio Fernandini.
Ellos deberán responder sobre la red criminal que tomó por asalto el Ministerio de Vivienda, en ese entonces a cargo de Geiner Alvarado, y que permitió a la empresa Markagroup ganar millonarios contratos a través de sobornos.
A esta sesión también fueron citados Luis Mesones Odar, exviceministro de Mype e Industria y exesposo de Goray, y Gonzalo Arrieta Jovic, uno de los directores del Fondo MiVivienda que colocó la empresaria como parte de un acuerdo tras la entrega de la coima de cuatro millones de soles para asegurar seis proyectos para Markagroup, de la que era gerente general.
El titular de este grupo de trabajo, Héctor Ventura, explicó que la citación se realiza en el marco de su labor de control político y que Goray y sus amigos ya fueron notificados. El congresista adelantó que su comisión citará a más involucrados.
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Goray, hoy colaboradora eficaz, condición por la que espera recibir beneficios penales, reside en Estados Unidos y puede entrar y salir del país, y está obligada a retornar cada 60 días. Por ello, la comisión no descarta que esta se presente esta mañana vía Zoom con su respectiva defensa legal.
Los tentáculos de Goray y su corrupta empresa abrazaron también a Sencico. A través de sobornos intentó vender al Estado un terreno en Piura para la construcción de un nuevo local de esta entidad, adscrita al sector Vivienda, y, según se pudo conocer, la negociación ilícita incluía el pago de una coima de 2 millones de soles al expresidente Castillo.
Fernandini, en tanto, se acogió a la confesión sincera y en sus declaraciones ante la Fiscalía admitió que Goray le pagó 10 mil soles por seis meses solo por prestar su departamento de San Isidro, donde se realizaron reuniones entre la empresaria y Marrufo.
Tal como reveló Perú21, un mensaje de WhatsApp que el hombre de prensa envió a Alvarado en agosto de 2021 en el que intercediendo por Goray solicita una reunión para conversar sobre el Fondo MiVivienda fue la chispa que encendió la corrupción que enquistó en ese sector la empresaria.