El fiscal Rafael Vela viajó a Brasil para coordinar las declaraciones de exdirectivos brasileños en juicio contra Humala. (Julio Reaño/GEC)
El fiscal Rafael Vela viajó a Brasil para coordinar las declaraciones de exdirectivos brasileños en juicio contra Humala. (Julio Reaño/GEC)

El fiscal superior Rafael Vela expresó hoy que el expresidente Ollanta Humala y su esposa Nadine Heredia, pero que las diligencias se realizarán de todas formas en un futuro cercano.

El líder del equipo especial Lava Jato se refirió así a la decisión del Supremo Tribunal de Justicia (STJ) de Brasil de suspender, a pedido de Humala, las manifestaciones de los empresarios Jorge Barata y Marcelo Odebrecht programadas entre el 16 y 25 de enero ante el Poder Judicial del Perú.

“Esta es una medida obstructiva y dilatoria (la suspensión) porque lo que se busca es que los testimonios se lleven a juicio como corresponde, donde Humala y Heredia tienen abogados y pueden formular las preguntas que correspondan (...) aquí no hay afectación, por el contrario debería ser de mayor interés de los investigados poder interrogar a los testigos brasileños para brindar la mayor cantidad de información a los jueces”, declaró Vela en radio Exitosa desde Brasil.

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Precisamente, el fiscal viajó a la ciudad de Sao Paulo para coordinar la intervención de Barata y Odebrecht, y otros exdirectivos, en las audiencias fijadas por la justicia peruana. La resolución del STJ cayó de sorpresa.

En esa línea, insistió en que Humala y Heredia solo han ganado tiempo porque los testigos tendrán que declarar sí o sí ante los magistrados.

“Igual van a tener que declarar (los exejecutivos de Odebrecht), han conseguido un aplazamiento por diez días pero eso es solamente es una medida temporal, que perjudica y es mala fe con el sistema de justicia el Perú (...) se busca que las programaciones sean perjudicadas, pero esto es inexorable”, expresó.

La expareja presidencial, como se sabe, enfrenta un juicio por el delito de lavado de activos al ser acusada de recibir dinero ilícito para financiar sus campañas presidenciales del 2006 y 2011. Para esta última, según la investigación, recibieron US$3 millones ilícitos de la compañía brasileña.

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