En el 'Día del Periodista', al presidente Ollanta Humala no se le ocurrió mejor idea para rendir su homenaje que 'encerrar' a los hombres de prensa que cubrieron su matinal recorrido en la obra del Tren Eléctrico, con el fin de evadir las preguntas sobre el problema que afronta Qali Warma, programa emblemático del gobierno.
Poco antes de que el mandatario descendiera de la obra, personal de seguridad ubicaron a los periodistas en el interior de un cerco de rejas metálicas, con excepción del equipo del canal del Estado.
Incluso, un oficial de la Policía Nacional acreditado a Palacio de Gobierno no dudó en solicitar el apoyo de los agentes de Seguridad del Estado para tal propósito.
Una vez que los periodistas estuvieron 'encerrados', el jefe de Estado se acercó para referirse al avance de la obra en San Juan de Lurigancho. Sin embargo, su rostro cambió cuando se le comenzó a preguntar por los niños intoxicados por consumir alimentos distribuidos por Qali Warma y las denuncias sobre deficiencias en el control de calidad.
"Vamos a esperar que la ministra (de Inclusión Social, Mónica Rubio) nos dé un informe", fue la expresión que repitió cuando se le dijo que el expresidente Alberto Fujimori había solicitado que se desactive el programa y se retorne al Pronaa de los años 90.
Inmediatamente después, el mandatario se retiró saludando a los periodistas por su día.