Constitución espera dictaminar el segundo proyecto esta semana. (GEC)
Constitución espera dictaminar el segundo proyecto esta semana. (GEC)

A paso lento. Con 40 minutos de retraso, la continuó ayer el debate del segundo proyecto de reforma del Ejecutivo y, luego de casi dos horas de debate, aprobó por mayoría cinco causales para cancelar la inscripción política de los movimientos regionales.

El grupo que lidera Rosa Bartra (FP) definió los alcances del artículo 13-A del proyecto de ley N° 28094 y estableció, por ejemplo, que estas organizaciones sean canceladas si no superan el 8% de los votos (valla electoral), tal como lo había propuesto el Ejecutivo.

Nueve votos respaldaron la fórmula, entre ellos el de Alejandra Aramayo (FP), quien diagnosticó que la “proliferación” de estas organizaciones no permitió un control efectivo de la ONPE. “Hay casi 178 movimientos habilitados, han participado 138 en la última elección de 2014 y solo 73 han presentado candidaturas”, dijo a Perú21.

Otra causal ligada al primer punto es la cancelación de la inscripción si el movimiento no va a una elección regional y “por no participar en la elección municipal de por lo menos dos tercios de las provincias y de por lo menos dos tercios de los distritos de la circunscripción”.

Este planteamiento encontró resistencia en NP, que, a través de sus representantes Marisa Glave y Alberto Quintanilla, plantearon objeciones y finalmente votaron en contra.

“Si se aplica lo que estamos aprobando a los últimos procesos regionales, ya hubiesen desaparecido la mayoría de movimientos. (...) Se está legislando sin conocer la realidad”, indicó Quintanilla a este diario.

Sin consenso
Agotado el primer punto de la agenda, la Comisión de Constitución pasó a debatir el inciso B del mismo artículo 13 respecto a la cancelación de alianzas electorales; sin embargo, no se llegó a buen puerto.

La propuesta del gobierno propone que estos pactos políticos se anulen “cuando concluye el proceso electoral respectivo” si la fórmula resulta ganadora. Este párrafo, empero, no aterrizó en un consenso por las diferencias entre quienes apoyan que la alianza electoral “se mantenga durante todo el periodo de mandato correspondiente”.

“La alianza no puede ser utilizada como una tabla de salvación para los partidos que calculan que no pueden pasar la valla”, dijo durante el debate Gilbert Violeta, idea que comparte Fuerza Popular, pero no la bancada aprista.

En 2016, el Apra se alió al PPC y formaron la Alianza Popular, que luego se disolvió al obtener 5% de votos. Ello permitió que solo cinco representantes del partido de la estrella lleguen al Congreso, pero ambas agrupaciones mantuvieron la inscripción.

Antes de finalizar la sesión, Rosa Bartra anunció que la redacción del artículo B ingresará a un cuarto intermedio y se proseguirá su debate “más adelante”.