No hay primera sin segunda. El presidente de la República, Martín Vizcarra, fue frío y distante al despedirse de la vicepresidenta Mercedes Araoz al finalizar la Gran Parada y Desfile Cívico Militar por Fiestas Patrias.
Después de despedirse del arzobispo de Lima, Carlos Castillo Mattasoglio, con quien intercambió sonrisas y palabras; el mandatario Vizcarra aprovechó ese momento para decirle adiós a Mercedes Aráoz con una leve inclinación de la cabeza.
Aunque cortés, el presidente Martín Vizcarra ya no le extendió la mano a la vicepresidenta y ella, apenas, y articuló alguna frase que el movimiento de sus labios dejó en evidencia acompañado de una mirada indiferente.
Horas antes —durante el saludo— Martín Vizcarra se dirigió a Mercedes Aráoz, pero fue evidente la incomodidad de ella. Como sabemos, los gestos dicen más que palabras y hoy tuvimos una muestra de eso.
ARAOZ EN EL MENSAJE PRESIDENCIAL
Horas antes —en diálogo con la prensa— el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Vicente Zeballos, dijo que por mandato constitucional el mensaje al país tiene que ser aprobado por el Consejo de Ministro y agregó que la vicepresidenta Mercedes Araoz no ha ido a los Consejos desde que él asumió.
Durante la propuesta de adelanto de elecciones del presidente de la República, una escena no pasó desapercibida y es que mientras todos los ministros del Gabinete estaban parados aplaudiendo la medida; la vicepresidenta Mercedes Araoz lucía sorprendida y se mantuvo sentada en su silla.