La presidenta del Tribunal Constitucional (TC), Marianella Ledesma, se pronunció acerca del uso de la vacancia presidencial por parte del Congreso de la República y subrayó que su continua aplicación genera “un desgaste político”. Enfatizó que en las causales de la destitución presidencial no figura la comisión de un delito.
“Las instituciones jurídicas tienen que ser usadas en su real dimensión. Hay que evitar el uso jurídico de la vacancia, que está orientada ante situaciones objetivas: murió el presidente, renunció el presidente, se trastornó el presidente. Pero en ninguna parte de las causales de vacancia está el delito”, expresó Ledesma Narváez en diálogo con Canal N.
“Todas estas historias nos llevan a un desgaste político como producto de una contienda política y que, muchas veces, mandatos que han sido orientados para gobernar cinco años terminan de repente en mandatos de menos tiempos, pero utilizando figuras que no son coherentes”, añadió.
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La titular del TC señaló que su posición es relacionar la incapacidad moral permanente a “la conducta asumida que rompe valores éticos”.
“La figura de la incapacidad moral permanente no puede ser vinculada a temas de delitos o infracción constitucional porque para eso la propia Constitución ha señalado mecanismos que están en el artículo 99 y 100″, advirtió.
Sobre el jefe de Estado, Pedro Castillo, Marianella Ledesma consideró que es un “presidente débil, políticamente hablando” y cuya objetividad “comienza a debilitarse también”.
“Es un presidente cuyo liderazgo se va menoscabando y eso es vital para dirigir al país. (...) las expectativas, los sueños de tantos electores que confiaron su voto a él, podrían llevar a un desengaño, políticamente hablando. La legitimidad en un mandatario es vital para construir, no solo liderazgo, sino acompañar a ese líder en esos sueños y objetivos que ofreció a su electorado”, sentenció.