Esta nota la relanzamos hoy con ocasión del cumpleaños 71 de Alejandro Toledo Originalmente fue publicada en 4 de febrero de 2017 cuando el ex mandatario acababa de ser acusado de haber recibido una coima de 20 millones para favorecer a una empresa brasileña durante su mandato.
La última campaña presidencial ya había demostrado que el nombre de Alejandro Toledo ya no era un sinónimo de lucha contra la corrupción. Anoche una acusación de haber recibido coimas sepultó aún más su reputación, confirmando que hace tiempo dejó de ser ese paladín que reinició el camino de la democracia en la década del 2000.
"Alejandro Toledo habría recibido 20 millones en coimas". La denuncia fue realizada por un colaborador eficaz que detalló que el dinero fue procesado bajo empresas offshore. De confirmarse, se habría puesto en marcha todo un operativo a gran escala para recepcionar los ilegales cobros.
Pero hace muchos años Alejandro Toledo había prometido luchar contra la corrupción. Lo hizo apenas pisó Palacio de Gobierno en 2001, cuando al convertirse en el primer mandatario elegido luego de la época oscura que significó el mandato de Alberto Fujimori.
"(En mi gobierno) Sí hay espacio para no permitir que la impunidad prevalezca", mencionó aquella tarde cuando la victoria fue anunciada.
Quince años después la realidad es otra. El ex presidente ha sido acusado de recibir millonarios sobornos y parece que el final de su camino político se avecina.