Apenas un día después de que el ex directivo de Odebrecht en Perú, Jorge Barata, declarara a fiscales peruanos que se reunió con directivos de la Confiep para coordinar aportes a la campaña fujimorista del 2011, un equipo de la Fiscalía de Lavados de Activos llegó esta mañana a la sede del gremio para incautar documentación.
En el interrogatorio de ayer, según fuentes fiscales, Barata contó que entregó, en dos armadas de US$500 mil, US$1 millón al entonces secretario general de Fuerza Popular, Jaime Yoshiyama, y US$200 mil al ex ministro fujimorista a Augusto Bedoya. El dinero sería usado para financiar la campaña de la lideresa de Fuerza Popular, Keiko Fujimori.
Pero otro hecho que reveló el ex ejecutivo es que se reunió con el presidente de la Confiep, Ricardo Briceño, y otros empresarios. En esa cita, se acordó que Odebrecht aportaría US$200 mil para que sean usadas en las actividades proselitistas de Fujimori. En comunicación con este diario, Briceño rechazó las afirmaciones de Barata.
Debido a esto, los fiscales que llegaron a las oficinas de la Confiep, ubicadas en San Isidro, fueron a incautar documentación que compruebe ese encuentro. Fuentes de Perú21 en el Ministerio Público indicaron que la diligencia se realizó desde tempranas horas "para evitar que se pueda ocultar o destruir" información.
Ayer mismo, a través de un comunicado, el gremio de empresarios negó las versiones de Barata y señaló que desde su organización no se entregó aportes al fujimorismo.