La reciente encuesta de Ipsos para Perú21 revela la alta desaprobación del Ejecutivo y el Congreso. El director de Estudios de Opinión de Ipsos, Guillermo Loli, analiza los factores.
Desde que asumió la presidencia solo tuvo una aprobación del 21% en diciembre pasado y, lamentablemente para esta situación política, su legitimidad es muy cuestionada; principalmente, esto se da en el sur y en la zona rural. El Congreso, por su parte, también tiene una baja legitimidad con 84% de desaprobación. La gente quiere un cambio en las autoridades.
El 68% desaprueba la gestión del premier Otárola. Quizá sea el momento de refrescar, eso podría darle un poco de aire a la presidenta Boluarte. El nivel de desaprobación de Otárola se da en todos los niveles y en todas las regiones; principalmente, desde el interior del país porque él es señalado como uno de los responsables de los excesos en las protestas. Él es claramente un responsable político de esta situación. Su cambio podría darle una mirada diferente al Gobierno.